Fisioterapia después de la cirugía de menisco.

Los meniscos son cartílago discos que actúan como choque absorbentes entre las superficies articulares del fémur y la tibia en la rodilla articulaciones. Al aumentar la superficie de contacto a través de los meniscos, el peso y los golpes se distribuyen y absorben uniformemente. Los meniscos también estabilizan el articulación de la rodilla.

Si una lesión en el menisco hace cirugía en el articulación de la rodilla necesario, el menisco puede suturarse, eliminarse parcial o completamente. El tratamiento fisioterapéutico después menisco La cirugía tiene como objetivo restaurar la movilidad del paciente y evitar los síntomas lo más rápido posible. Además, el desarrollo de lesiones futuras debe prevenirse mediante ejercicios específicos.

Contenido de la fisioterapia después de la cirugía de menisco.

Con el inicio de la fase de rehabilitación postoperatoria, medidas descongestionantes como el manual linfa el drenaje está en primer plano. El sistema linfático es estimulado por varias técnicas de agarre. De este modo se puede evitar y reducir la hinchazón de la rodilla operada.

Se realizan ligeros ejercicios de tensión para la pantorrilla y muslo músculos para estimular el sangre fluir de nuevo y prevenir trombosis. Especialmente en los primeros días después de la operación, el entrenamiento de la marcha también forma parte del plan fisioterapéutico, ya que los pacientes aún no pueden volver a poner todo el peso sobre la rodilla dañada, según el tipo de operación. También es importante movilizar rótula y entrenar para doblar y se extiende las articulación de la rodilla.

El tejido cicatricial siempre debe tratarse también para evitar adherencias y reducir la elasticidad. Si la primera fase de rehabilitación ha progresado bien, la fisioterapia ahora se dedica activamente al entrenamiento de refuerzo. Los objetivos aquí son lograr una movilidad completa, soportar todo el peso y mejorar coordinación, para que el paciente esté libre de dolor y capaz de hacer frente al estrés diario lo más rápido posible.

Todo esto se logra mediante un fortalecimiento focalizado, se extiende y ejercicios de movilización, que se realizan bajo la supervisión del terapeuta. El proceso de rehabilitación depende del tipo de cirugía de menisco. Básicamente, el cirujano tiene tres opciones para la operación: En fisioterapia, se desarrolla un programa de rehabilitación individual para cada paciente para acelerar el proceso de curación y lograr los mejores resultados posibles.

Normalmente, este proceso toma de 4 a 6 semanas, pero puede durar varios meses dependiendo de la gravedad del problema.

  • Extirpación parcial o completa del menisco
  • Sutura de menisco
  • Implante de menisco

En el caso de la extirpación (parcial) del menisco, a los pacientes generalmente se les permite poner todo el peso sobre la rodilla afectada inmediatamente o después de solo unos días. Esto significa que la vuelta a las actividades deportivas ligeras como nadar o montar en bicicleta es posible después de solo 3-6 semanas.

Por lo general, es posible soportar todo el peso a las 6-8 semanas después de la operación. Con la sutura meniscal, el proceso de rehabilitación es más largo, ya que la sutura primero debe cicatrizar bien. Por esta razón, un alivio de la articulación de la rodilla de 3-6 semanas con muletas es necesario.

Además, el paciente usa un órtesis de rodilla, que está destinado a limitar el movimiento de la articulación, de modo que no sea posible una flexión y extensión completas. A partir de la 7ª semana se puede iniciar la fisioterapia y la formación médica propiamente dicha. Las actividades deportivas normalmente solo son posibles nuevamente después de 3-6 meses. El proceso de rehabilitación en este procedimiento quirúrgico no difiere significativamente del de la sutura meniscal. Con un implante de menisco, solo es necesaria una fase de alivio más larga de 6-8 semanas (en lugar de 3-6 semanas) al principio para aliviar el tejido recién formado.