Basiliximab: efectos, usos y riesgos

Basiliximab es un fármaco de la clase de fármacos inmunosupresores. Se utiliza para prevenir el rechazo después hígado or riñón trasplantar.

¿Qué es basiliximab?

Basiliximab es un fármaco de la clase de fármacos inmunosupresores. Se utiliza para prevenir el rechazo después hígado or riñón trasplantar. Basiliximab es un fármaco que pertenece al grupo de monoclonales quiméricos anticuerpos. Fue aprobado en los Estados Unidos y la Unión Europea en 1998. El anticuerpos se producen en un cultivo celular en células de mieloma de ratón. Otros componentes del fármaco terminado son:

  • Cloruro de sodio
  • Sacarosa
  • manitol
  • Glicina
  • Agua
  • Fosfato de sodio monohidrógeno

Acción farmacológica

El basiliximab se utiliza como inmunosupresor, por lo que suprime las reacciones del sistema inmunológico. El basiliximab se usa para prevenir el rechazo de órganos trasplantados. Al mismo tiempo, el medicamento no debe aumentar la susceptibilidad a las infecciones. Basiliximab solo puede administrarse en centros especiales que cuenten con personal y técnicos equipados para atender adecuadamente a los pacientes con reacciones de hipersensibilidad al fármaco. En general, la tolerabilidad del basiliximab suele considerarse buena.

Aplicación y uso médico

Basiliximab es un anticuerpo. El objetivo del anticuerpo son las células T activadas. Estos suelen ser los responsables de los rechazos de órganos trasplantados. La sistema inmunológico reconoce el órgano trasplantado como extraño y trata de destruirlo con la ayuda de células inmunes. Las células T forman células asesinas que migran al tejido del órgano y causan inflamación allí. Basiliximab bloquea la denominada subunidad alfa del receptor de interleucina-2 de las células T. Normalmente, el factor de crecimiento de células T interleucina-2 se une a este receptor. La interleucina-2 estimula el crecimiento y la diferenciación de las células T. También estimula la producción de interleucinas, interferones, células asesinas naturales y macrófagos. Sin embargo, debido a que el basiliximab bloquea el receptor, la interleucina-2 no puede llegar a las células T. Por tanto, se evita el crecimiento y la proliferación de las células T. La respuesta inmune está ausente y la sistema inmunológico está debilitado. El trasplante reacción de rechazo se detiene así efectivamente. El basiliximab se suele administrar junto con ciclosporina A y daclizumab. Daclizumab, como basiliximab, bloquea los receptores de interleucina-2. Ciclosporina además previene la síntesis de nueva interleucina-2. El basiliximab se usa en adultos y niños para prevenir el rechazo agudo del injerto después riñón or hígado trasplantar. En adultos, el fármaco se puede utilizar en combinación con azatioprina, micofenolato mofetil, ciclosporinay corticosteroides para tratamientos a largo plazo. Existen estudios que confirman la eficacia de basiliximab en el enfermedad inflamatoria intestinal crónica colitis ulcerosa. Sin embargo, actualmente no hay aprobación para esta indicación. Tan pronto como se sepa que el paciente recibirá un órgano de un donante, se utiliza basiliximab. Los adultos reciben 20 miligramos por vía intravenosa dos horas antes del trasplante. Cuatro días después del trasplante, se administran otros 20 miligramos. Los estudios demostraron que cuando se agrega basiliximab a un inmunosupresor estándar terapia forestal, hay menos rechazos de trasplantes.

Riesgos y efectos secundarios.

El medicamento no debe usarse en casos de hipersensibilidad conocida a cualquier ingrediente activo del medicamento. Basiliximab tampoco debe usarse durante el embarazo o durante la lactancia. El basiliximab puede provocar muchos efectos secundarios. Dolor or náusea son muy comunes. En raras ocasiones, los pacientes también padecen erupciones en la piel, estornudos, urticaria, espasmos del tracto respiratorio o respiración sibilante. Además, edema pulmonar puede desarrollarse mientras toma basiliximab. En edema pulmonar, el líquido se acumula en los alvéolos y tejido conectivo de los pulmones. Síntomas típicos de edema pulmonar incluir poco profundo respiración, inquietud, tos, dificultad para respirar y una decoloración azul de la piel. En etapas posteriores, los pacientes también tos espumoso esputo. El edema pulmonar ejerce presión sobre el corazón y, por lo tanto, deben tratarse lo antes posible. Otros posibles efectos secundarios incluyen estreñimiento, infecciones del tracto urinario, anemia, hipercolesterolemia, hiperpotasemiay hipertensión. El síndrome de liberación de citocinas puede ocurrir en aproximadamente uno de cada 10,000 casos. Esto implica la liberación de una gran cantidad de citocinas de las células T. Como resultado, fiebre, respiración dificultades, escalofríos y piel aparecen erupciones. El síndrome de liberación de citocinas puede ser fatal. Aunque basiliximab generalmente se tolera bien, solo se puede administrar en centros especiales debido a la posibilidad de efectos secundarios graves. Aquí, las posibles reacciones de hipersensibilidad se pueden tratar de forma rápida y profesional.