Terapia Inflamación de la glándula salival.

Terapia

Con la excepción de inflamación de las glándulas salivales causada por un virus, es importante detectar y tratar la causa para que el tejido glandular pueda recuperarse y sanar posteriormente. Las piedras deben eliminarse del conducto glandular si es posible para evitar una recurrencia de la inflamación. Si enfermedades reumáticas como Síndrome de Sjogren son la causa de la inflamación recurrente, deben tratarse con medicamentos si es posible.

Como ya se mencionó, un seco boca constituye la base de la colonización con patógenos. Esta colonización se puede contrarrestar con una ingesta suficiente de líquidos y Higiene Oral. Durante la enfermedad se recomienda recurrir a alimentos blandos para que masticar y tragar no duela demasiado.

Saliva La producción también puede estimularse comiendo alimentos ácidos, como caramelos ácidos sin azúcar o con la ayuda de jugos ácidos o agua mezclada con jugo de limón, que enjuaga y limpia los conductos y tejidos glandulares. En muchos casos, los cálculos salivales más pequeños también se pueden transportar desde los conductos glandulares al cavidad oral de esta manera, lo que le ahorra al interesado la extirpación endoscópica en breve anestesia. Masajes de la zona donde se piedra salival Queda atascado en el conducto glandular también puede ayudar a aflojarlo y así facilitar su extracción.

If bacterias fotosintéticas son la causa de la inflamación, antibióticos se utilizan para el tratamiento. En el caso de una inflamación viral de la glándula, la terapia sintomática es el foco principal. Esto incluye el tratamiento de dolor y fiebre con medicación.

Los medicamentos adecuados son ibuprofeno y paracetamol. Sin embargo, la terapia sintomática también es parte del tratamiento de otros desencadenantes mencionados anteriormente. Si un purulento absceso se ha formado como una complicación, debe abrirse para permitir la pus para drenar y evitar que se rompa en el sangre vasos y posiblemente causando envenenamiento de la sangre. Las constricciones existentes en los conductos glandulares deben eliminarse, ya que también pueden ser la causa de una inflamación recurrente. En el caso de inflamaciones repetidas de las glándulas salivales, que apenas sanan o solo después de un largo período de tiempo, se debe considerar la extirpación de la glándula afectada.