Pulgar torcido

Definición

Un esguince es una lesión del aparato cápsula-ligamento-articulación que no produce fracturas óseas (fracturas) ni desplazamientos de la superficie articular (luxaciones). Como casi todos los demás articulaciones, la articulación del pulgar también puede verse afectada por un esguince. El esguince de la articulación del pulgar es a menudo el llamado articulación de la silla de montar del pulgar (Lat.

Articulatio carpometacarpalis pollicis), que se encuentra en la transición de la mano al pulgar. Es posible una amplia gama de esguinces, desde esguinces leves, que generalmente corresponden solo a un leve estiramiento excesivo de los ligamentos que rodean y sostienen la articulación, hasta esguinces severos, que a menudo van acompañados de músculos desgarrados y / o ligamentos desgarrados. Por lo tanto, es importante saber que no todos los esguinces son igualmente "graves" y es muy posible que una variante requiera tratamiento médico, mientras que otros esguinces del pulgar se curan rápida y fácilmente.

Causas

La causa de un esguince generalmente radica en accidentes cotidianos banales o lesiones deportivas; rápidamente, es posible que haya tropezado o atascado y puede haber sucedido Casi siempre una fuerza que presiona el pulgar más lejos de la mano de lo que sería naturalmente posible causa el esguince. Este movimiento antinatural estira demasiado los ligamentos y provoca un esguince.

Con respecto a lesiones deportivas, aquellos deportes que implican mucho trabajo con las manos, como el balonmano o el voleibol, son muy riesgosos en términos de lesiones en el pulgar. Si una pelota lanzada rápida y poderosamente golpea el pulgar en un ángulo desfavorable, un esguince es casi inevitable. Pero también al esquiar, no es raro que una caída con un ángulo desfavorable en los bastones de esquí provoque un esguince en el pulgar.

Diagnóstico

Para realizar un diagnóstico, el médico tratante primero escuchará atentamente la descripción del paciente y, sobre todo, pedirá detalles sobre el curso del accidente. Esto generalmente proporciona pistas iniciales sobre el tipo de lesión detrás del problema. Luego, examinará detenidamente la mano lesionada (y generalmente la mano sana para comparar) y palpará la lesión.

Una localización exacta del dolor es tan importante como determinar la extensión exacta de la lesión y posiblemente reconocer otra lesión. En algunos casos, un ultrasonido or Rayos X puede ser necesario un examen. Si los hallazgos aún no son seguros, se realiza una tomografía por resonancia magnética (MRT). Esto puede ser necesario e importante en casos individuales para distinguir claramente otras lesiones de los esguinces severos del pulgar.