Pie zambo congénito | Músculos de la pierna

Pie zambo congénito

El congénito pie deforme, también Pes equinovarus, es una mala posición del pie del niño y ocurre con una frecuencia de 1: 1000 nacimientos. Los niños se ven afectados con el doble de frecuencia que las niñas. La causa de la deformidad del pie es una alteración del equilibrar del inferior pierna músculos, en los que predominan los flexores plantares, es decir, los flexores del pie hacia la planta del pie, y los supinadores, elevaciones del borde medio del pie.

Los "pie deforme músculo ”también se llama músculo tibial posterior, que pone el pie en supinación y lo dobla hacia la planta del pie. La mala posición existe directamente al nacer y es una combinación de varias deformidades. Por lo general, una rotación hacia adentro del pie, la posición del pie en hoz del antepié, pie puntiagudo, pie hueco y una desviación lateral del talón se unen.

El origen exacto de lo congénito. pie deforme aún no está claro. Sin embargo, se supone que la posición del embrión existentes útero es un factor decisivo. Una cantidad reducida de líquido amniótico también podría promover el desarrollo de un pie zambo.

Como resultado de un defecto del tubo neural, la formación defectuosa de la unión embrionaria del centro sistema nervioso, parálisis de la parte inferior pierna Los músculos pueden ocurrir, lo que lleva al desarrollo de un pie zambo. También se está discutiendo si el pie zambo congénito puede ocurrir en la cuarta a duodécima semana de el embarazo como resultado de tomar ácido fólico antagonistas como Aminopterin® o Methotrexat®. El tratamiento debe iniciarse inmediatamente después del nacimiento. Inicialmente, la terapia consiste en la fijación del pie, la llamada retención, que se adapta gradualmente a una posición correcta (retroceso).

La yeso El yeso debe cambiarse con regularidad y se continúa con el reembolso. A la edad de unos tres meses, una operación en el Tendón de Aquiles puede llegar a ser necesario, por lo que el tendón se alarga y el ángulo entre el tobillo y hueso del talón se corrige. Otras medidas pueden incluir trasplantar del músculo tibial anterior, correcciones óseas o rigidez articular. Para estirar los músculos acortados y movilizar el articulaciones del pie, los procedimientos fisioterapéuticos deben usarse desde el principio, ya que a largo plazo puede ocurrir una nueva desviación hacia la mala posición.