Tratamiento | Neumonía en el bebé

Tratamiento

Al decidir cómo y dónde se debe tratar al niño, la gravedad de la neumonía juega un papel decisivo. Si la infección es leve o moderada, el bebé puede ser tratado de forma ambulatoria, es decir, en casa. El criterio de hipoxia, la concentración reducida de oxígeno en el sangre, es decisivo para una estancia hospitalaria.

Debe garantizarse un suministro de oxígeno suficiente a los órganos para proteger al bebé de daños permanentes. Si el niño experimenta dificultad respiratoria grave, si la velocidad de respiración aumenta permanentemente, o si la enfermedad conduce a restricciones peligrosas en la conducta de beber, el niño debe ser ingresado en el hospital aunque tenga suficiente saturación de oxígeno. En el caso de recién nacidos y bebés hasta los 3 meses de edad, siempre es recomendable optar por la estancia hospitalaria.

El tratamiento de neumonía en bebés puede basarse en el uso de antibióticos u optimizarlo. Dado que este último debe estar dirigido a condición del niño se puede influir positivamente. Si la saturación de oxígeno es inferior al 93%, el paciente debe ser ventilado con oxígeno. gafas, o, si el nariz se desplaza, a través de una máscara o cabeza encajonar.

Dado que se excretan cantidades extremadamente grandes de líquido debido a la fiebre y rápido respiración, algunos bebés alcanzan un estado de deshidratación durante el curso de la enfermedad. Esto debe contrarrestarse con una estómago tubo o una infusión. La estómago El tubo debe ser lo más pequeño posible para no restringir respiración aún más.

Cuando se administran infusiones, la electrolitos en la del bebe sangre debe comprobarse periódicamente para asegurarse de que el equilibrar es mantenido. Analgésicos puede aumentar la disposición del niño a moverse. Esto ayuda a tos hasta las secreciones acumuladas y puede promover la progresión.

La terapia antipirética alivia el sufrimiento del paciente, pero no tiene ningún efecto terapéutico sobre el neumonía sí mismo. Se debe seleccionar el antibiótico adecuado en función de la edad y el patógeno. Dado que la farmacoterapia no suele esperar hasta que se detecta el patógeno, la elección del fármaco se basa en las concentraciones geográficas y estacionales, así como en los patógenos estándar para la neumonía infantil.

Se debe prestar atención a una posible penicilina alergia, que requiere el uso de otros grupos de antibióticos. La administración oral de los medicamentos siempre debe tener como objetivo y debe durar de 7 a 10 días. La terapia viral generalmente se limita a tratar los síntomas.

El uso de antivirales casi nunca es necesario. En caso de una probada influir neumonía, se pueden usar varios inhibidores de la neuraminidasa, pero una infección puede evitarse con una vacuna anual. Las infecciones por hongos se tratan con antimicóticos, pero ya en los adultos a veces tienen efectos secundarios considerables. Por lo tanto, el tratamiento farmacológico de la neumonía siempre debe realizarse bajo la supervisión de un especialista.