¿Cuándo se vuelve peligrosa la neumonía para los bebés? | Neumonía en el bebé

¿Cuándo se vuelve peligrosa la neumonía para los bebés?

Neumonía en los bebés siempre es una enfermedad grave. Los bebés siempre son tratados como pacientes hospitalizados, ya que se les administra antibióticos a través de vena para combatir el los gérmenes.Además, el bebé condición debe ser monitoreado de cerca para asegurar que no surjan complicaciones. Si un bebé llama la atención debido a un cambio en el comportamiento, como falta de voluntad para beber, letargo o rapidez y superficialidad. respiración, es absolutamente necesario consultar al pediatra en una etapa temprana.

Los síntomas como tos, fosas nasales, abdomen distendido o una inquietud general del bebé también pueden indicar neumonía. Si neumonía está presente, el tratamiento debe iniciarse inmediatamente, por lo que no debe pasar mucho tiempo antes de que se consulte a un pediatra. Si se sospecha de neumonía, el pediatra derivará inmediatamente al bebé a una clínica, que puede tomar las medidas adecuadas. En Alemania, las opciones de tratamiento son muy buenas, por lo que la neumonía suele curarse en una o dos semanas sin consecuencias. Dado que la neumonía puede provocar complicaciones graves como la sepsis (sangre envenenamiento), la atención médica para el bebé es esencial.

Pronóstico

Básicamente, la neumonía no tiene por qué ser peligrosa para un bebé. Con medicamentos y otras terapias, hay una mejora significativa en los próximos 2 a 3 días. El agotamiento del niño desaparece lentamente, pero no es infrecuente una debilidad general en el período posterior a la recuperación.

Esto también pasará con la restauración completa de la vitalidad física. Las complicaciones pueden volverse peligrosas para el bebé, favorecidas por la neumonía existente. Esto incluye, por ejemplo, Derrame pleural.

Si la inflamación se propaga a los pulmones del bebé, el -gritó también puede inflamarse (pleuritis). Esto no solo causa dolor cuando respiración, pero también puede provocar una acumulación de líquido en el espacio pleural. El líquido puede consistir en un infiltrado inflamatorio y / o sangre.

El volumen que absorbe el líquido significa que los pulmones del bebé están cada vez más privados de espacio para una expansión completa y respiración la actividad está aún más restringida. Otra complicación es una pulmón absceso. Esto implica la encapsulación de un foco de inflamación, lo que puede hacer que una terapia con medicamentos existente sea ineficaz. La mayoría de los abscesos drenan hacia los bronquios durante el proceso de curación y no requieren cirugía.