Nervio óptico: estructura, función y enfermedades

La nervio óptico se encarga de hacer posible que las personas reconozcan su entorno. Por tanto, es una de las partes más importantes de los ojos. Al mismo tiempo, diferentes enfermedades pueden limitar la función del nervio óptico.

¿Qué es el nervio óptico?

La nervio óptico está formado por fibras nerviosas. Estos son los encargados de que la imagen, que se perciba a través del órgano sensorial más importante, llegue al cerebro. Un total de aproximadamente 1 millón de fibras nerviosas se combinan en el nervio óptico. Solo cuando las señales se transmiten correctamente al cerebro, se forma una imagen. El nervio óptico trabaja principalmente con luz incidente. Va desde los globos oculares hasta el cerebro. Para poder adaptarse a todos los movimientos, tiene forma de S. Algunos médicos definen el nervio óptico menos como un nervio y mucho más con una "vía" del cerebro. Su desempeño y función se pueden comparar con la sustancia blanca del cerebro. Además, el nervio óptico es inervado por sangre vasos que surgen de lo suave meninges. El curso del nervio óptico tiene varias partes. Antes de la óptica los nervios entran en el cerebro, se cruzan. Una vez el los nervios están dañados por enfermedad o fuerza externa, no se pueden descartar consecuencias graves y molestias.

Anatomía y estructura

El nervio óptico conecta la retina con el cerebro. Su longitud medidas alrededor de cuatro a cinco centímetros. Al mismo tiempo, el nervio óptico se divide en diferentes secciones dentro del ojo. La primera sección está ubicada en el globo ocular y se denomina porción intrabulbar. Después de salir del globo ocular, se abre a la órbita. A la sección intraorbitaria le sigue la sección intracraneal. Este se encuentra en el cráneo. Aquí, el nervio óptico consta de fibras nerviosas que se agrupan. Las fibras nerviosas se originan en el ganglio células, que pueden estar ubicadas en la capa celular más interna de la retina. El nervio óptico atraviesa el globo ocular y luego lo abandona en su camino hacia el cerebro. El punto donde los haces de fibras nerviosas salen del ojo se llama disco óptico. En el público en general, esta ubicación se conoce cada vez más como la "punto ciego. " La abertura por donde el nervio óptico entra en el cráneo se llama canalis opticus. Después de pasar por la órbita, el nervio óptico también está rodeado por el anillo tendinoso de los músculos oculares. Más adelante, la vía óptica se cruza antes de que los haces de fibras nerviosas lleguen finalmente al cerebro, pudiendo así transmitir los estímulos recibidos.

Función y tareas

El nervio óptico permite a los humanos reconocer contornos, colores y movimientos. Si no estuviera presente, solo resultaría una imagen negra. Por tanto, el nervio óptico representa una parte crucial del órgano sensorial más importante. La imagen en sí se crea por refracción de la luz y varios procesos en la retina. Tan pronto como la luz incide sobre la retina, las irradiaciones producen ciertas excitaciones en el ojo. La retina finalmente transmite la imagen, o las excitaciones, al nervio óptico en forma de estímulos o señales. Los estímulos se transmiten hasta que llegan al cerebro y la persona afectada puede reconocer su entorno. En última instancia, el cerebro es responsable de convertir las señales en imágenes. El nervio óptico solo transmite estímulos y no imágenes preexistentes. En este proceso, el hemisferio izquierdo del cerebro procesa la información del ojo derecho y el hemisferio derecho del cerebro convierte las señales del ojo izquierdo. Fundamental para este proceso es el cruce de la óptica ocurrido previamente los nervios. Muy a menudo, la función del nervio óptico no se nota hasta que varias enfermedades o limitaciones interfieren con él. Sin embargo, estos tienen el potencial de dejar un daño permanente. Tan pronto como los pacientes experimenten una disminución de la visión u otros síntomas, no deben dudar en consultar a un médico. El hecho de que el nervio óptico sea el segundo par craneal ilustra su importante función.

Enfermedades y dolencias

Tan pronto como la función se vuelve limitada, generalmente es necesario organizar la vida cotidiana de manera diferente. Existen diferentes influencias que pueden ser responsables de causar daño al nervio óptico. Más comúnmente, estos son ejercidos por fuerza externa. Estos incluyen, por ejemplo, un accidente a través del cual se tira o aplasta el nervio óptico. Esto puede ocurrir en un accidente automovilístico, pero también por un puñetazo en la región del ojo; en tales casos, el sangrado suele ser el responsable de los síntomas. Estos a menudo son el resultado de la cuenca del ojo y Lead a un aumento de la presión. Como resultado del aumento de presión, los nervios ópticos pierden su espacio habitual y en su lugar pueden aparecer hematomas. Además de la fuerza externa, las infecciones también son una posibilidad. Estos a menudo son causados ​​por bacterias fotosintéticas y virus y afectan principalmente a la cuenca del ojo. Sin embargo, no se puede descartar daño al nervio óptico. Inflamación del nervio óptico. a menudo ocurre en esclerosis múltiple, con la parte detrás del ojo en particular siendo afectada por la infección. Además del movimiento dolor, la visión se ve afectada. En algunos pacientes, ceguera ocurre. Sin embargo, esto no es un permanente condición. A pesar de lo correcto medidasSin embargo, no se puede descartar que la visión no vuelva a su estado original incluso después de la inflamación ha disminuido. La "glaucoma”Provoca un aumento de la presión en el ojo. La vasos a través de los cuales se inervan el nervio óptico y la retina sufren compresión. Pueden producirse daños graves por la falta de suministro.