Enfermedad de Behcet

Introducción

La enfermedad de Behcet es una inflamación del pequeño sangre vasos, un supuesto vasculitis. La enfermedad lleva el nombre del médico turco Hulus Behcet, quien describió por primera vez la enfermedad en 1937. Además de la vasculitis, la enfermedad también puede manifestarse en otros sistemas de órganos. La causa no se ha aclarado claramente hasta la fecha.

Síntomas de la enfermedad de Behcet

La enfermedad de Behcet es una enfermedad sistemática, lo que significa que la enfermedad puede extenderse a todo el sistema de órganos. Como resultado, cada paciente puede experimentar diferentes síntomas con diversos grados de gravedad. Estos incluyen: Los principales síntomas de la enfermedad de Behcet incluyen aftas dolorosas en el boca, que ocurren principalmente en la parte posterior de la boca, aftas o ulceraciones en el área genital e inflamación de la capa media del ojo.

Otros síntomas acompañantes en algunos pacientes son varios cambios en la piel. Estos pueden ser acné-como pústulas, folículo capilar inflamación, úlceras, formación de nudos o tendencia a la irritación de la piel. Debido a que la enfermedad de Behcet progresa en recaídas, siempre hay intervalos libres de síntomas.

Los primeros signos o síntomas son principalmente las aftas recurrentes.

  • Apthae o ulceración en la boca
  • Apthae o ulceración del ano
  • Inflamaciones del ojo.
  • Cambios en la piel e irritaciones de la piel.
  • Quejas del tracto gastrointestinal.
  • inflamación de las articulaciones
  • Afectación del sistema nervioso.

El tratamiento de la enfermedad de Behcet consiste principalmente en la administración de cortisona. Se administra en forma de comprimidos o por vía intravenosa, dependiendo, entre otras cosas, de la condición y gravedad de los síntomas del paciente.

Cortisona inhibe la inflamación en el cuerpo. Una aplicación local de cortisona, por ejemplo, en forma de ungüento, también es posible para inflamaciones visibles desde el exterior, como las del ojo. En caso de un curso muy grave de la enfermedad o recaídas, se puede recetar un fármaco inmunosupresor adicional o alternativo. El fármaco inmunosupresor reduce la función del sistema inmunológico limitando el crecimiento de células inmunes. A menudo se administra una combinación de ambos fármacos en casos de afectación patológica del centro sistema nervioso.