Diagnóstico | Fatiga cronica

Diagnóstico

En primer lugar, un completo historial médico debe ser recolectado. Debe describirse desde cuándo se han presentado las quejas y en qué medida se ven afectadas las actividades habituales. Es importante que el médico sepa si hay otras molestias y qué otras enfermedades se sabe que existen en la persona en cuestión.

A esto le sigue un detallado examen físico y, por regla general, un sangre prueba. Si existe una sospecha concreta de la presencia de una enfermedad que conduce a la fatiga, debe investigarse. Si no hay indicios de la presencia de dicha enfermedad, un diagnóstico de la fatiga crónica se puede producir el síndrome.

Distribución de frecuencias

La frecuencia de la fatiga crónica no se puede determinar con exactitud debido a las numerosas causas, se supone que alrededor del 10% de los adultos se ven afectados. Pacientes con esclerosis múltiple son afectados por la fatiga crónica en aproximadamente el 80%, y un total de aproximadamente el 40% de células cancerosas los pacientes la padecen, aunque la frecuencia varía según el tipo de cáncer. El síndrome de fatiga crónica afecta a unas 300,000 personas en Alemania, y las mujeres de entre 30 y 40 años en particular lo padecen a menudo.

La fatiga crónica suele manifestarse a través de una constante sensación de agotamiento, una constante cansancio y una fatiga rápida. Además, se suele quejar de una reducción del rendimiento, así como de un aumento del olvido y de los trastornos de concentración. A pesar de cansancio, a menudo se informan trastornos del sueño y también puede haber una mayor necesidad de dormir. La fatiga crónica suele ir acompañada de un estado de ánimo deprimido. Otras quejas como fiebre, pérdida de peso, dolor en las articulaciones, la hinchazón de las piernas u otras pueden dar indicios de una causa de fatiga crónica.

Terapia de la fatiga crónica

El tratamiento de la fatiga crónica debería, en principio, depender de la causa. Si hay falta de sueño, debe remediarse. Si el glándula tiroides es poco activo, la hormona tiroidea debe tomarse regularmente y debe tomarse hierro en caso de deficiencia de hierro.

Si no se puede encontrar una causa tratable, existen numerosas opciones de terapia, por lo que el éxito varía de una persona a otra. Básicamente, se utilizan tres estrategias: Homeopatía también puede ser de apoyo, por lo que el tratamiento debe llevarse a cabo en consulta con un médico o farmacéutico con experiencia en homeopatía. Al elegir los glóbulos adecuados, la descripción exacta de los síntomas es crucial.

Si hay una sensación de agotamiento y fatiga, Árnica, por ejemplo, puede ser útil. Si hay una sensación de debilidad, dolores de cabeza y un nervioso estómago además de la fatiga, potasio phosphoricum puede ayudar. - Se llevan a cabo medidas de activación, se debe evitar el estrés y así se puede reorganizar la vida.

  • Finalmente, relajación Las técnicas y la higiene adecuada del sueño se consideran factores de éxito. - Las sustancias vegetales también se utilizan contra la fatiga crónica. El objetivo es aumentar la resistencia del organismo al estrés y otros factores negativos. Las plantas utilizadas para este propósito incluyen rosas, raíz de taiga y ginseng raíz, albahaca, frutos de sisandra y también jalea real.