Células etmoidales: estructura, función y enfermedades

La células etmoidales forman parte del hueso etmoides, que se ubica en la parte interna de las cavidades frontal, nasal y ocular. Además de su función de estabilidad, se conectan a los nervios y están involucrados en la percepción olfativa. Fracturas daño en el nervio, tumores, inflamación así como la formación de pólipos pueden ser posibles enfermedades relacionadas con las células etmoides.

¿Qué son las células etmoidales?

Células etmoidales (cellulae ethmoidale) pertenecen al hueso etmoidal (Os ethmoidale), que es un área ósea en el cráneo y los ojos y las fosas nasales. El nombre toma prestado de la estructura en forma de tamiz del hueso agujereado. No son "células" en el sentido médico-biológico, sino que se refieren a las cavidades llenas de aire. La totalidad del células etmoidales también se llama laberinto etmoidal (labyrinthus ethmoidalis).

Anatomía y estructura

El hueso etmoides está localizado anatómicamente en un área que se proyecta y limita tanto al seno frontal como a las cavidades nasal y orbitaria. Como ramificación ósea, las células etmoidales son penetradas por cámaras o cavidades (espacios de neumatización). El etmoides huesos tienen paredes delgadas y agujeros relativamente grandes. Adyacente al seno frontal hay alrededor de ocho a diez células etmoidales. Las células etmoidales están inervadas en un sentido más amplio a través de ramas del quinto par craneal (nervio trigémino). Por un lado, los cordones nerviosos se extienden hacia la órbita a través de las células etmoidales posteriores, donde se conectan a los pares nervio óptico (nervio óptico). Por otro lado, los cordones nerviosos de las células etmoidales anteriores se extienden hacia el cavidad nasal (nervio nasociliar) a través de la placa etmoidal (lámina cribrosa). La lámina cribrosa es una de un total de cuatro placas óseas diferentes (láminas) del hueso etmoidal. Los espacios de neumatización del senos paranasales están forrados con mucosa y ciliado epitelio. En el pasaje nasal, el correspondiente los nervios suministrar el mucosa nasal a través de las células etmoidales.

Función y tareas

El hueso etmoidal en su conjunto es responsable de la estabilidad entre las regiones involucradas (cráneo base, órbita, cavidades nasales). Al mismo tiempo, divide las áreas, como la base de la cráneo del desplegable cavidad nasal. O el hueso etmoidal medio, que junto con el hueso de reja (vómer) forma el tabique nasal. Separa las estructuras anatómicas. Directamente relacionado con las células etmoidales está el sistema olfativo. Es a traves del olfativo los nervios, que están conectados al bulbo olfatorio (bulbus olfactorius) y al cavidad nasal a través de las cavidades de la placa etmoidal, que nuestro sentido de olor se produce. Las cavidades en la placa etmoidal permiten el paso de los nervios y, por lo tanto, que se produzca la percepción olfativa. Una vez que se detecta el olor a través del nariz, o más precisamente a través de las células receptoras olfativas en el mucosa nasal, el estímulo se transmite a través del bulbo olfatorio a la corteza cerebral. A través de la conexión ramificada con el quinto par craneal, el nervio oftálmico (nervus oftalmicus) y las ramas nerviosas del mandíbula superior (nervus maxillaris) y mandíbula inferior (nervus mandibularis), que es responsable, entre otras cosas, del movimiento de masticación. Por tanto, las células etmoidales juegan un papel importante en la transmisión de estímulos.

Enfermedades

Las enfermedades que afectan a las células etmoidales pueden ser causadas, por un lado, por malformaciones anatómicas que pueden resultar en enfermedades crónicas. De manera similar, las células etmoidales pueden verse afectadas por fracturas de las placas óseas, enfermedades de las estructuras nerviosas e infecciones y dolencias causadas por bacterias fotosintéticas y virus. No debe olvidarse que las reacciones alérgicas también pueden desencadenar inflamación. Dado que el hueso etmoides se encuentra en un área sensible accesible a través de varias vías, las regiones involucradas son particularmente susceptibles a la enfermedad. La enfermedad más conocida es inflamación de las senos paranasales (sinusitis). Se hace una distinción entre aguda y crónica. sinusitis. Las células etmoidales son parte de la senos paranasales. Virus, bacterias fotosintéticas o las alergias inflaman la membrana mucosa de los senos nasales y promueven la hinchazón. Como consecuencia adicional, puede producirse supuración. Si pus está encapsulado en una cavidad, esto se llama empiema. Los senos paranasales también incluyen seno maxilar, los seno esfenoidal y el seno frontal. A medida que avanza la inflamación, estas regiones pueden verse afectadas. La enfermedad de todas las partes de los senos paranasales se llama pansinusitis.Antibióticos, local u oral cortisona preparaciones, se utilizan enjuagues nasales especiales para sinusitis tratamiento. Si la enfermedad está tan avanzada que no se logra mejoría con la medicación, puede estar indicada la intervención quirúrgica. También en caso de formación de pólipos (proliferación de tejido), extirpación de células etmoidales (etmoidectomía) o saneamiento quirúrgico parcial (extirpación de mucosa, pólipos) Es indicado. Procesos inflamatorios que se diseminan a través del ojo, del seno frontal al cerebro volverse peligroso. Una infección bacteriana del seno frontal puede Lead a meningitis. El diagnóstico precoz de los síntomas puede prevenir tal inflamación ascendente. Las malformaciones anatómicas también pueden promover la inflamación crónica. Fracturas o lesiones en el base del cráneo y las placas etmoidales aumentan el riesgo de fuga de líquido cefalorraquídeo (LCR). La inflamación puede ocurrir en el seno maxilar zona. Raíz de diente La inflamación o los abscesos purulentos son a menudo la causa de otras enfermedades de los senos paranasales y maxilares. El camino de conexión entre el mandíbula superior y el nervio craneal atraviesa el nervio maxilar. Las enfermedades de los conductos del nervio etmoidal incluyen neuralgia, Tales como neuralgia trigeminal: un facial dolor causado por el quinto par craneal (nervio trigémino), a menudo como resultado de la sinusitis. Las enfermedades asociadas con las células etmoides incluyen además tumores y formaciones de quistes que interfieren con las respiración y el drenaje natural de secreciones. Las células etmoidales pertenecen a una estructura compleja en la que los ojos, cerebro, olor, masticando, respiración están implicados indirectamente y las enfermedades relacionadas con ellos pueden ser igualmente de gran alcance.