Terapia de la osteocondrosis | Osteocondrosis

Terapia de osteocondrosis

En las primeras etapas de osteocondrosis, la terapia conservadora es siempre el enfoque principal. Por tanto, una operación no es la primera opción terapéutica. En la mayoría de los casos, los medicamentos dolor La terapia se apoya en ejercicios específicos para la espalda.

Los ejercicios tienen como objetivo fortalecer los músculos del tronco para aliviar la columna. Analgésicos son los más utilizados en la farmacoterapia. A veces, sin embargo, los medicamentos antiinflamatorios también pueden brindar alivio.

La analgésicos generalmente se toman por vía oral. Sin embargo, si el dolor se vuelve demasiado fuerte, el médico también puede inyectar un analgésico directamente en el área afectada. los dolor Primero se debe usar medicación para superar la fase aguda del dolor, de modo que luego se pueda iniciar la fisioterapia.

El objetivo es relajar los músculos en la fase inicial, lo que se puede conseguir, por ejemplo, mediante electroterapia or terapia de calor en forma de luz roja, fango ("tratamiento de barro") y masaje. Solo cuando los músculos ya no están tensos se pueden comenzar los ejercicios reales, de modo que los músculos se fortalezcan para ayudar a aliviar la columna. En algunos casos, se puede recetar un corsé de soporte (órtesis) para respaldar la terapia.

Además de los ejercicios de desarrollo muscular, entrenamiento de espalda también es útil. Allí, a las personas afectadas se les enseña una postura saludable que es agradable para la espalda. Si exceso de peso existe, se debe intentar reducir el peso corporal al mismo tiempo.

Estas medidas pueden prevenir un cuadro clínico completo en una etapa temprana de osteocondrosis. Sin embargo, la terapia conservadora es más difícil cuando la columna cervical se ve afectada, ya que los músculos de esta área tienen poca capacidad para aliviar la columna. Aquí, el objetivo principal es aflojar los músculos para reducir el dolor.

Además, las inyecciones analgésicas se utilizan a menudo para tratar la irritación de los nervios. Si la enfermedad ya está demasiado avanzada, a menudo es necesaria la cirugía. Como opción quirúrgica, un disco gravemente afectado se puede extraer y reemplazar por una prótesis de disco. Además, se pueden realizar operaciones de estabilización y alineación.