Función motora gruesa: función, tareas, rol y enfermedades

La función motora gruesa, al igual que la función motora fina, es una función de movimiento del cuerpo humano. Los movimientos motores gruesos van acompañados de movimientos de todo el cuerpo, como saltar o correr.

¿Qué es el movimiento motor grueso?

Mientras que los movimientos de motricidad fina implican el movimiento cuidadoso de partes individuales del cuerpo, los movimientos de motricidad gruesa se caracterizan por una gran amplitud de movimiento. Por tanto, la totalidad del trabajo de los músculos esqueléticos se cuenta como actividad motora gruesa.

Función y tarea

Las habilidades motoras juegan un papel importante en desarrollo infantil En particular. Las habilidades motoras gruesas, como gatear, se preparan para el desarrollo motor fino en la secuencia de desarrollo. Especialmente en desarrollo infantil, las habilidades motoras juegan un papel importante. Las habilidades motoras gruesas, como gatear, preparan la secuencia de desarrollo para el desarrollo motor fino, que se puede ver en la edad preescolar, por ejemplo, en la correcta sujeción de un lápiz. Si un niño no ha adquirido suficientes habilidades motoras gruesas, la adquisición de habilidades motoras finas es imposible o al menos muy problemática. Por lo tanto, los niños deben poder adquirir suficiente experiencia motora gruesa. De lo contrario, con habilidades motoras gruesas inadecuadas, les resultará difícil, por ejemplo, aprender a escribir o desarrollar habilidades manuales, lo que se expresará en una falta de inclinación a participar en actividades creativas y, en general, les hará menos capaces de viviendo. Las habilidades motoras gruesas se pueden entrenar a través del deporte, por ejemplo. En los bebés, por otro lado, el inicio de las habilidades motoras gruesas no puede verse influenciado por factores externos. Sin embargo, los trastornos del desarrollo en bebés y niños pequeños también aparecen cuando las habilidades motoras gruesas no se desarrollan de una manera apropiada para su edad. Existen diferentes pruebas para comprobar el nivel de desarrollo de un niño y así determinar si existe un trastorno del desarrollo motor. Para determinar el nivel de habilidades motoras gruesas de un paciente, se examina su tensión muscular, su sentido de equilibrar, y su sentido de su propio cuerpo (conciencia corporal). Para ello, el médico puede pedirle al paciente que se pare sobre una pierna, por ejemplo. Si encuentra esto difícil, a menudo es un signo de un déficit motor grueso, que puede ocurrir no solo debido a un trastorno del desarrollo, sino también a otras enfermedades o una constitución generalmente pobre. Dado que las causas de un trastorno de la motricidad gruesa son múltiples, los especialistas que intervienen en el diagnóstico proceden de diferentes disciplinas: principalmente de la neurología, pero también de la medicina interna. A los efectos de un diagnóstico diferenciado, también se utilizan procedimientos de imagen si es necesario. Por ejemplo, se puede utilizar una resonancia magnética para examinar la columna o el cerebro por daños y lesiones con el fin de determinar si esta es la causa de un déficit motor grueso repentino. Si el diagnóstico de los especialistas descarta una causa orgánica, el paciente puede someterse a fisioterapia. Esto es particularmente necesario para los niños para que se pueda eliminar el déficit de desarrollo en las habilidades motoras gruesas. Esto se debe a que, además de, por ejemplo, los problemas escolares que pueden resultar de un desarrollo deficiente de las habilidades motoras gruesas, la autoestima del niño también se ve afectada. Si aumenta el miedo a avergonzarse, esto a su vez tiene una influencia negativa en la motricidad gruesa: si los niños ya no se atreven a probar secuencias de movimientos desconocidas, su desarrollo se estanca.

Enfermedades y quejas

Varias enfermedades dificultan la motricidad gruesa o incluso el desarrollo de la motricidad gruesa. Por ejemplo, un síntoma de TDAH (también ADS) puede ser un déficit de desarrollo en las habilidades motoras gruesas. A golpe también puede afectar las habilidades motoras gruesas. En Alzheimer enfermedad, el cuerpo pierde memoria para las habilidades motoras una vez adquiridas, por lo que esta enfermedad también puede afectar las habilidades motoras gruesas. Las habilidades motoras gruesas también se ven afectadas por el uso de alcohol y drogas; sin embargo, a medida que se eliminan las sustancias tóxicas, se restauran. La situación es diferente en el caso de lesiones graves en el médula espinal: Si los impulsos de los movimientos motores gruesos y finos no llegan a las extremidades a través de los tractos nerviosos, el paciente requiere tratamiento médico intensivo inmediato. Si se produce una caída, los paramédicos primero verifican las habilidades motoras gruesas de las extremidades individuales, siempre que persona lesionada está consciente, a fin de descartar lesiones graves en el médula espinal. Si hay un tumor en el cerebro or médula espinal, esto también puede interferir con las habilidades motoras gruesas. Es decir, si la ubicación del tumor impide la transmisión de impulsos de movimiento. Por lo tanto, las alteraciones repentinas de la motricidad gruesa también pueden referirse a daños en el cerebro o médula espinal. Son una señal de advertencia del cuerpo y requieren un mayor control médico. Además, los problemas articulares y musculares también pueden Lead a la restricción motora gruesa. Fisioterapéutico medidas puede ser útil para remediar estos problemas de movimiento. En ningún caso esta medida debe llevarse a cabo por iniciativa propia del paciente, ya que puede agravar el problema de fondo. Si las habilidades motoras gruesas impiden que un paciente participe en actividades deportivas y se mueva sin problemas, se recomienda la presentación a un médico. Esto es especialmente cierto en los niños, cuyo desarrollo motor requiere una atención especial.