Examen U4

¿Qué es el U4?

El examen preventivo U4 forma parte del programa preventivo para que bebés y niños observen su desarrollo físico y mental y puedan intervenir directamente en caso de dificultades. El U4 se preocupa especialmente por los hábitos de sueño y alimentación, las habilidades motoras y la atención del bebé. Además, al niño se le puede recetar fluoruro y vitamina D de nuevo y la cita preventiva también se puede utilizar como cita de vacunación para la vacunación de seis veces contra tétanos, difteria, chillando tos, hemofilo, hepatitis B y neumococo.

¿Cuándo tendrá lugar la U4?

El cuarto examen preventivo se realiza en el tercer al cuarto mes de vida. El tiempo más temprano es a partir del segundo mes de vida y el último tiempo posible es a los cuatro meses y medio. Si el examen se va a realizar fuera de este plazo, los padres deberán pagarlo ellos mismos. La cita se puede adaptar al calendario de vacunación del bebé, por lo que no es necesaria una cita adicional con el pediatra.

¿Qué exámenes se realizan?

Primero, los padres reciben un cuestionario en el que completan lo que han observado en su hijo. Solo después de la evaluación de este cuestionario comienza el examen real del niño. La primera parte del examen incluye un detallado examen físico, que incluye medir y pesar al niño.

El examen físico va seguido de un visual y examen auditivo: además de examen físico, los padres reciben consejos sobre nutrición y comportamiento para dormir. Si los padres lo desean y de acuerdo con el calendario, se administra la segunda vacunación seis veces mayor. Esta es una vacuna contra tétanos, difteria, hemofilo influir tipo B, ferina tos, hepatitis B y neumococo.

El pediatra también recomienda la administración de vitamina D y fluoruro. Posteriormente se pueden hacer más citas para vacunas y precauciones.

  • El pediatra observará los ojos y la piel del bebé y evaluará el color y la textura.

    De esta manera el médico ya puede ver posibles hígado disfunción o falta de oxígeno por el color de la piel.

  • El pediatra también examina el abdomen del bebé y escucha la corazón, pulmones y estómago. El examinador presta atención a los corazón y respiración sonidos, así como sonidos digestivos que son demasiado fuertes o demasiado débiles. Al palpar el abdomen, un posible agrandamiento del bazo or hígado también se puede detectar.

    Si existe alguna duda, el pediatra también puede realizar una ultrasonido de las zonas afectadas.

  • El pediatra también palpa las fontanelas del bebé, es decir, los espacios en el cráneo, para evaluar si el cabeza puede crecer lo suficiente.
  • Parte del examen físico también es una prueba de la movilidad del bebé. articulaciones. En el siguiente paso, el médico prueba varios reflejos y la fuerza de los músculos del bebé. Para hacer esto, el examinador levanta al bebé de las manos y verifica si el bebé ya puede sostener el cabeza por sí mismo.
  • El bebé debe poder girar su cabeza hacia una fuente de sonido. Esto lo prueba el pediatra haciendo diferentes sonidos con papel o sonajeros.
  • Además, el niño debe poder fijar la mirada en las personas y seguirlas.
  • El bebé también debe emitir sonidos de balbuceos, lo que indica el comienzo del desarrollo del habla.