Síntomas asociados a un quiste mandibular | Cistectomía del diente

Síntomas asociados de un quiste mandibular

Uno de los principales síntomas de un quiste mandibular es un latido dolor. Esto suele ocurrir cuando el quiste ya ha desplazado el hueso de la mandíbula. La dolor es causado por la presión que ejerce la acumulación de líquido sobre el periostio sensible.

Especialmente en las primeras etapas del desarrollo de un quiste, bien puede ser que no dolor es sentido. Esto suele ocurrir tan pronto como el quiste comienza a desplazar el hueso circundante. Además, el quiste puede manifestarse en una sensación de presión poco habitual. Esto suele ir acompañado de una hinchazón o una protuberancia. Tan pronto como se detecte este o cualquiera de los otros síntomas de un quiste, es muy importante consultar a un médico para prevenir posibles daños secundarios provocados por el quiste.

¿Cuál es el procedimiento para una cistectomía en un diente?

En el curso de una cistectomía, es decir, una extirpación quirúrgica completa de un quiste, el seno maxilar se expone por primera vez. Esto significa que se puede acceder al quiste desde el cavidad oral o desde fuera del boca. Después de extraer el hueso por encima del quiste y exponerlo, se vacía y se extrae por completo.

Es muy importante que todos los restos del quiste se eliminen aquí sin excepción. Los restos de quistes remanentes pueden provocar la reaparición de un quiste. Con pequeños quistes (hasta aprox.

1 cm) no es necesario rellenar el espacio hueco. Luego, el hueso vuelve a crecer en el espacio hueco. En los quistes más grandes, la cavidad debe rellenarse con un material de reemplazo óseo.

Esto se puede hacer usando un Colágeno esponja o hueso autólogo. Se envía una muestra al laboratorio para aclarar si el cambio es benigno. La herida se cierra y cicatriza en poco tiempo.

Una cistectomía a menudo se combina con una tratamiento de conducto or apicectomía. Si el diente ha provocado la formación de un quiste durante su crecimiento, en la mayoría de los casos se debe extraer (extraer). La cistectomía es uno de los procedimientos de rutina para los especialistas tratantes. Como regla general, la cistectomía se realiza de forma ambulatoria y en la mayoría de los casos no toma más de una hora.

Con los cuidados pre y posoperatorios, se deben programar de 2 a 3 horas. La duración de todo el proceso de curación suele ser de unas 2 semanas. Después de 7 a 10 días, los puntos se pueden quitar de la herida sin complicaciones.

Sin embargo, pueden pasar varios años antes de que el defecto óseo finalmente se haya regenerado por completo. Sin embargo, la cicatrización ósea no supone ningún impedimento para el paciente. Como una regla, anestesia local es completamente suficiente para realizar una cistectomía.

Dependiendo de los deseos del paciente, anestesia general puede ser inducido o el paciente puede ser puesto en una especie de sueño crepuscular por óxido nitroso. Anestesia general se recomienda encarecidamente, especialmente para pacientes ansiosos o pacientes muy sensibles. Sin embargo, en la mayoría de los casos esto no está cubierto por el salud seguro, pero debe ser pagado por el propio paciente como pago adicional.