Parálisis cerebral espástica

Definición

La parálisis cerebral espástica es una paresia, es decir, músculo relajación causado por daños en el cerebro (de ahí el "cerebral"). La parálisis cerebral espástica también se conoce como "parálisis cerebral infantil“. En la mayoría de los casos, cerebro ya se ha detectado daño en el recién nacido. Se manifiesta a través de diversos trastornos de los músculos esqueléticos de las extremidades, es decir, los músculos necesarios para los movimientos activos. Estos incluyen debilidad muscular y problemas para pararse y caminar.

Causas

En aproximadamente la mitad de todos los casos de parálisis cerebral espástica, estos pueden atribuirse a una causa clara por una alteración en cerebro desarrollo antes o durante el nacimiento. En la mayoría de los casos, hay una falta de oxígeno, que las células nerviosas del cerebro necesitan para sobrevivir. Debido a esta falta, las células nerviosas mueren y ciertas áreas del cerebro fallan.

Entre las posibles causas se encuentran las infecciones. Particularmente común durante el embarazo son las enfermedades infecciosas toxoplasmosis, rubéola y citomegalia causada por el virus CMV. Otra posible causa es el sangrado en el cerebro, que puede ser causado por daño a la cabeza durante el nacimiento.

Además, ciertas drogas o el alcohol pueden dañar el cerebro del niño durante el embarazo y provocar parálisis cerebral espástica. Si el placenta no se desarrolla correctamente, el cerebro del niño tampoco recibe suficiente oxígeno durante el embarazo y puede dañarse. La parálisis cerebral espástica hereditaria es extremadamente rara.

Diagnóstico

El diagnóstico de parálisis cerebral espástica se basa en gran medida en la historial médico, es decir, la consulta del médico con los padres del bebé afectado. Durante esta entrevista, se hacen preguntas específicas sobre los síntomas que se han presentado. Para encontrar la causa de la parálisis cerebral espástica, un examen de la sangre y la orina, así como el líquido cerebral, siempre deben realizarse por vía lumbar. punción. Para asegurarse de que haya daño en el cerebro, una imagen de resonancia magnética del cabeza también se toma.

Síntomas asociados

Los síntomas de la parálisis cerebral espástica desafortunadamente retrasan y restringen el desarrollo de los recién nacidos. En la parálisis cerebral espástica, ocurren muchos síntomas diferentes de los músculos, que se vuelven particularmente obvios durante los movimientos. Esto conduce a la llamada parálisis espástica, es decir, una rigidez de ciertos músculos, lo que dificulta o imposibilita su movimiento.

Además, se produce ataxia, es decir, un trastorno de los movimientos. Esto es particularmente evidente al estar de pie y caminar. La persona afectada tiene problemas para ejecutar correctamente los movimientos debido al difícil control de la musculatura.

Además, pueden ocurrir muchos otros síntomas. Aproximadamente la mitad de todos los afectados también padecen ataques epilépticos y tienen un desarrollo de inteligencia reducido o lento. En algunos casos, hay alteraciones en el comportamiento, el habla o la audición.