Mente: función, tareas, rol y enfermedades

La mente es la capacidad de un ser humano para pensar analíticamente, para percibir y juzgar su entorno conscientemente. La mente también está siempre asociada con la razón.

¿Qué es la mente?

La mente es la capacidad de un ser humano para pensar analíticamente, para percibir y juzgar su entorno conscientemente. Desde la antigüedad, los filósofos se han ocupado del tema de la mente. Las personas con mente son capaces de pensar analíticamente, de percibir su entorno conscientemente y de juzgar, clasificar y tomar decisiones racionales. La mente también está estrechamente relacionada con el concepto de razón. En el siglo IV a. C., Aristóteles definió la comprensión como la "facultad del pensamiento conceptual y razonador". La filosofía moderna con Immanuel Kant define Verstand como la "facultad de formación de conceptos". Médica y psicológicamente, la mente es el poder pensante de un ser humano que es capaz de poner su inteligencia por encima de los impulsos naturales. A través del pensamiento analítico y la capacidad de comprender, conoce el significado de conceptos y palabras y tiene una gran imaginación.

Función y tarea

El término mente también está relacionado con el término Homo Sapiens, que significa "ser humano racional". La mente a menudo se contrasta con la razón, porque las personas con una mente bien desarrollada generalmente también reaccionan racionalmente y toman decisiones racionales. Mente significa "comprender, formar conceptos, sacar conclusiones, juzgar y pensar". Las personas tienen sentido común cuando son capaces de comprender las relaciones causales y pensar de manera lógica y compleja. El requisito previo para este proceso es reconocer el “principio de causa y efecto” y comprender los procesos de manera lógica e implementarlos dialécticamente. Otros pilares de la mente son el intelecto, la flexibilidad y la creatividad. Las personas con intelecto tienen la capacidad de asimilar y juzgar los contenidos mentales y sensuales. Esto incluye la razón como una facultad superior de cognición, que no se refiere a la cognición de un solo contexto, sino a varios contextos. La lógica es la doctrina del consecuencialismo, donde la lógica pura incluye la doctrina del "concepto, juicio y conclusión", mientras que la lógica aplicada es la doctrina de "definición, prueba y método". Además, está la mente reactiva, que se basa en una base de estímulo-respuesta. Esta parte de la mente no se controla conscientemente, pero realiza una respuesta dirigida a un estímulo específico. La mente reactiva no está bajo el control volitivo del ser humano, que ejerce el mando sobre la conciencia. Sin embargo, la mente no es una parte del ser humano que actúa solo, sino que está estrechamente relacionada con el cuerpo y el alma. La agencia humana, sin embargo, está controlada no solo por la mente sino también por las emociones, porque solo de esta manera es posible tomar decisiones complejas basadas en el conocimiento experiencial intuitivo a través del pensamiento racional. La mente y, por tanto, la razón se ubican en el lóbulo frontal. Cuando una persona piensa racionalmente sobre un problema, considera los pros y los contras y toma una decisión sobre esta base, utiliza la corteza frontal, que se denomina corteza prefrontal. La interconexión de la corteza frontal y la sistema límbico demuestra cuán estrechamente están vinculados mente, razón y emociones. La sistema límbico es responsable de controlar las emociones. En el pasado, cerebro La investigación asumió que las personas siempre toman sus decisiones de manera racional de acuerdo con el principio de costos y beneficios y tratan de lograr el máximo beneficio para sí mismos. Sin embargo, investigaciones recientes han concluido que se ha sobrestimado la influencia de la corteza prefrontal en la mente humana. Ahora está claro que las personas también toman decisiones basadas en emociones sin pensar en probabilidades y beneficios. Las acciones afectivas se basan en un estado emocional fuerte y no se realizan de manera racional y razonable. La sistema límbico de las cerebro asume estas decisiones basándose en los sentimientos, alineando las señales fisiológicas y el contexto situacional. El área central del sistema límbico es la amígdala, que reconoce situaciones que son desventajosas para las personas, por ejemplo, situaciones que implican peligro, y las protege de tomar decisiones equivocadas. En esta situación, las personas suelen tomar decisiones que no están controladas por la mente racional, sino por las emociones y las acciones afectivas. La amígdala también contiene el sistema de recompensa. El núcleo accumbens se agita en una situación que la gente percibe como positiva, mientras que la corteza insular se activa cuando una situación se percibe como negativa. Por tanto, esta parte del cerebro se mueve cada vez que las personas perciben algo como injusto y perjudicial para ellos.

Enfermedades y malestar

También existen numerosas enfermedades asociadas con la mente. Las enfermedades que más afectan la capacidad de pensar analíticamente, formar conceptos, emitir juicios y tomar decisiones son demencia y Alzheimer enfermedad, que afecta a muchas personas a medida que envejecen. Las personas afectadas tienen memoria problemas; sus cerebros ya no pueden absorber, procesar y almacenar información. Esta enfermedad cerebral no solo se acompaña de memoria trastornos, pero generalmente también por trastornos del comportamiento. Los pacientes ya no pueden realizar tareas cotidianas importantes por sí mismos y dependen de la ayuda de otras personas. A menudo se convierten en casos de enfermería. Otras enfermedades que pueden afectar la mente son depresión., neurosis, trastornos perceptivos y obsesivo-compulsivos. Las personas afectadas pueden estar limitadas en su pensamiento racional y emocional hasta el punto de que su vida diaria se vea restringida de manera significativa y médica. terapia forestal es absolutamente necesario para restaurar la normalidad o al menos aliviar los síntomas.