¿Por qué medicamentos coloreados?
Los medicamentos coloreados son más fáciles de distinguir para los pacientes; especialmente para las personas mayores, que a menudo tienen que tomar muchos medicamentos diferentes en diferentes momentos del día, el colorante es una ventaja. Estructura el ritmo de ingesta, por ejemplo, la pastilla roja por la mañana, la pastilla blanca al mediodía y la pastilla azul por la noche. De esta forma, los medicamentos no se confunden tan fácilmente.
Cuanto más llamativos sean los comprimidos (color, forma, pero también forma farmacéutica), más fáciles serán de reconocer (por ejemplo, la pastilla azul para la potencia o la pastilla con una cruz para el dolor de cabeza). Algunos pacientes a menudo no pueden recordar el nombre del medicamento que han tomado, pero sí pueden recordar su color. Entonces los médicos podrán sacar conclusiones sobre el medicamento.
El azul calma, el rojo despierta.
Tabletas y cápsulas
Sin embargo, el color de un fármaco no sólo favorece el reconocimiento, sino que también influye en la eficacia del fármaco y en su aceptación por parte de los pacientes.
El color juega un papel importante, por ejemplo, en el efecto placebo de comprimidos y cápsulas. Varios estudios han llegado a las siguientes conclusiones, por ejemplo:
- Los pacientes depresivos respondieron mejor a los comprimidos de color amarillo que a los verdes o rojos.
- Los pacientes con hipertensión, por el contrario, tenían preferencia por los comprimidos blancos.
- En general, las tabletas rojas y negras parecen ser más efectivas que las blancas. Se informa que los marrones tienen el efecto laxante más fuerte.
Los fabricantes farmacéuticos utilizan desde hace algún tiempo estos conocimientos de la psicología del color. Por eso los tranquilizantes suelen ser de color azul, los estomacicidas de color verde, los analgésicos fuertes y los fármacos cardiovasculares de color rojo, los antidepresivos y estimulantes suelen ser de color rojo, amarillo o pastel, y las píldoras anticonceptivas de color lavanda o rosa.
Inyecciones de colores
A la cabeza del tratamiento placebo del dolor se encuentra la inyección morada de vitamina B12. Un investigador del dolor calculó que equivalía al efecto de cinco miligramos de morfina.
Precio y sabor
Además del color y la forma farmacéutica, el precio y el sabor del medicamento también influyen. Muchos pacientes creen que un medicamento caro funciona mejor que uno barato y que un medicamento de sabor amargo es mejor que uno de sabor agradable.
