Causas de la hernia inguinal

Las causas de una hernia inguinal se puede dividir en congénito y adquirido.

  • Un congénito hernia inguinal existe, como su nombre indica, desde el nacimiento y tiene su origen ya durante la maduración del niño durante el embarazo.
  • El adquirido hernia inguinal, por otro lado, se desarrolla después del nacimiento, debido a debilidades o sobrecarga o carga incorrecta de la región de la ingle. La causa de una hernia inguinal suele ser la persistencia del llamado "processus vaginalis".

    Esta es una conexión entre la cavidad abdominal y la ingle que existe durante el embarazo existentes embrión. Esta conexión normalmente se cierra hasta el nacimiento. Si esto no sucede o solo de manera incompleta, las asas intestinales pueden deslizarse a través del canal abierto hacia el escroto or labios.

    Si entra fluido el escroto en el niño en lugar de asas intestinales, es un testicular hidrocele.

Por el contrario, una hernia inguinal adquirida se desarrolla solo después del nacimiento, generalmente en la edad adulta tardía. En este caso, puede haber una hernia inguinal directa o indirecta. En general, las causas de una hernia inguinal adquirida se pueden asignar a varias áreas:

  • En el curso de la vida el tejido conectivo se debilita y pierde su elasticidad.

    Esto hace que la pared abdominal sea más susceptible a perforaciones desde el interior.

  • El otro aspecto incluye la sobrecarga y la carga incorrecta de la pared abdominal. Esto puede ocurrir, por ejemplo, en fumadores, donde la pared abdominal está sometida a un mayor estrés debido a la tos frecuente y al aumento de presión resultante en la cavidad abdominal. Además de este efecto indirecto de fumar, también se supone que nicotina tiene un efecto desfavorable directo sobre la estabilidad del tejido conectivo.
  • Otras situaciones en las que aumenta la presión en la cavidad abdominal también aumentan el riesgo de una hernia inguinal, por ejemplo al estornudar, defecar o levantar pesos pesados, ya sea en la vida cotidiana, en el trabajo o durante la práctica de deportes. De este modo, estreñimiento or el embarazo también puede contribuir al desarrollo de una hernia inguinal.
  • Además, la llamada ascitis: retención de agua en la cavidad abdominal, generalmente en la base de un hígado enfermedad - y un agrandamiento de la próstata, que es muy común en hombres mayores, favorece el desarrollo de una hernia inguinal.
  • Además, las influencias genéticas también juegan un papel: las hernias inguinales frecuentes deberían hacer que se sienta y se dé cuenta, porque a menudo hay una debilidad genéticamente causada del tejido conectivo. Finalmente, exceso de peso o tumores rectales también son posibles causas, ya que ambos aumentan la presión en la cavidad abdominal.