Fiebre del dengue: síntomas, tratamiento.

Breve descripción

  • ¿Qué es el dengue? Una infección viral transmitida por el mosquito Aedes.
  • Presencia: principalmente en países tropicales y subtropicales, pero también (ocasionalmente) en Europa.
  • Síntomas: a veces ninguno, por lo demás síntomas típicamente parecidos a los de la gripe (como fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, dolor en las extremidades, dolores musculares); en caso de complicaciones, entre otras, alteraciones de la coagulación sanguínea, vómitos, descenso de la tensión arterial, inquietud, somnolencia.
  • Pronóstico: curso generalmente benigno; mayor riesgo de complicaciones en niños y segundas infecciones
  • Prevención: Evitar las picaduras de mosquitos (ropa larga, mosquitero, repelente de mosquitos, etc.), vacunación si es necesario.

Fiebre del dengue: vías de infección e incidencia

Estos mosquitos se encuentran principalmente en entornos urbanos o, en general, en regiones pobladas por humanos. Prefieren poner sus huevos cerca del agua (botellas, barriles de lluvia, baldes, etc.). Si las hembras están infectadas, pueden transmitir el virus directamente a la cría. Las hembras de los mosquitos también son las que transmiten la enfermedad a los humanos.

¿Pueden las personas contagiarse entre sí con el dengue?

Generalmente no se produce la transmisión directa del dengue de persona a persona, es decir, sin la presencia de mosquitos Aedes.

A diferencia de los virus de la gripe, por ejemplo, los virus del dengue no se encuentran en la saliva, según los conocimientos actuales. Por tanto, el dengue no se puede transmitir al estornudar, toser o besar. Sin embargo, hay casos individuales en los que los investigadores suponen que las personas se infectaron a través de relaciones sexuales sin protección.

Los investigadores han podido detectar el ARN del virus del dengue en el semen, las secreciones vaginales y la orina. Sin embargo, aún no está claro hasta qué punto esto puede provocar una infección (también es posible que la infección se produzca a través de pequeñas lesiones sufridas durante las relaciones sexuales y, por tanto, se transmita sangre infectada). Una prueba positiva no significa necesariamente que la persona afectada sea contagiosa, ya que solo detecta el material genético del virus del dengue.

Aunque rara vez se informa, la transmisión directa del virus del dengue entre humanos no juega un papel relevante en la propagación de la fiebre del dengue, según los expertos. El factor decisivo es la transmisión a través del mosquito Aedes.

Aparición de la fiebre del dengue

Sin embargo, debido al calentamiento global, el mosquito tigre asiático ahora también está muy extendido en el sur de Europa y continúa ampliando su área de asentamiento. En los últimos años ya se han registrado casos aislados de infección por dengue en Europa, por ejemplo en Madeira, Croacia, Francia y España. Los expertos temen que el mosquito también se extienda cada vez más a Europa continental.

Los países con infección más común en 2018, según los datos de informes de la Ley de Protección contra Infecciones (IfSG), fueron:

  • Tailandia: 38 por ciento
  • India: 8 por ciento
  • Maldivas: 5 por ciento
  • Indonesia: 5 por ciento
  • Cuba: 4 por ciento
  • Camboya: 4 por ciento
  • Sri Lanka: 4 por ciento
  • Vietnam: 3 por ciento
  • México: 2 por ciento
  • Tanzania: 2 por ciento
  • Otros: 25 por ciento

Dengue: enfermedades en aumento

La fiebre del dengue se ha extendido rápidamente en las últimas décadas. En los últimos 50 años, el número de personas infectadas se ha multiplicado por treinta. Los expertos estiman que entre 284 y 528 millones de personas en todo el mundo contraen el virus del dengue cada año.

Fiebre del dengue: síntomas

Muchas personas infectadas tampoco muestran ningún síntoma (especialmente los niños).

Complicaciones del dengue

En la mayoría de los pacientes, el dengue se cura sin mayores consecuencias. Sin embargo, en algunos casos surgen complicaciones: los médicos distinguen entre dos cursos graves de la enfermedad, que también pueden poner en peligro la vida. Se presentan principalmente en niños y adolescentes menores de 15 años, y generalmente en pacientes que ya han tenido dengue:

Síndrome de shock del dengue (DSS): cuando la presión arterial disminuye debido a la enfermedad, el corazón ya no puede bombear suficiente sangre a través del cuerpo. Como resultado, la frecuencia cardíaca aumenta considerablemente. Sin embargo, órganos vitales como el cerebro y los riñones ya no reciben suficiente suministro.

Las señales de advertencia de tales complicaciones son:

  • dolor abdominal repentino
  • vómitos repetidos
  • caída repentina de la temperatura corporal por debajo de 36° C
  • sangrado repentino
  • caída repentina de la presión arterial
  • pulso rápido

Fiebre del dengue: tratamiento

No existe una terapia causal para esta infección. Esto significa que el médico sólo puede aliviar los síntomas, pero no combatir el virus en sí.

Mientras no se produzcan complicaciones, no es necesario que el paciente sea hospitalizado. Sin embargo, tan pronto como aparecen signos de hemorragia o el shock es inminente, el tratamiento hospitalario (posiblemente en la unidad de cuidados intensivos) es inevitable. Allí se pueden controlar estrechamente los signos vitales (frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria, presión arterial, etc.). Además, se administran infusiones o unidades de sangre a los pacientes según sea necesario.

Fiebre del dengue: prevención

En principio, el dengue se puede prevenir mediante vacunación y profilaxis de exposición.

Vacunación contra el dengue

La primera vacuna contra el dengue se autorizó en la UE en diciembre de 2018. Los profesionales médicos administran tres dosis de la vacuna a intervalos de seis meses.

La segunda vacuna contra el dengue recibió su aprobación en la UE en diciembre de 2022. Se administra en un régimen de dos dosis con un intervalo de tres meses entre la primera y la segunda dosis de la vacuna.

Aprobado para niños de cuatro años en adelante, adolescentes y adultos. Actualmente (junio de 2023), las agencias pertinentes están considerando una posible recomendación de vacunación para los viajeros a zonas endémicas de dengue.

Profilaxis de exposición

  • Use pantalones largos y mangas largas.
  • Aplicar repelentes (aerosoles para mosquitos) en la piel y la ropa.
  • Estire los mosquiteros con un tamaño de malla de no más de 1.2 mm, equivalente a aproximadamente 200 MESH (mallas/pulgada2), sobre la cama.
  • Poner mosquiteras en ventanas y puertas (impregnadas de insecticidas)

Fiebre del dengue: exámenes y diagnóstico.

En la fase inicial, los síntomas principales del dengue son indistinguibles de los de una gripe normal. Sin embargo, un médico debidamente especializado, como por ejemplo un médico tropical, a menudo puede sospechar ya una infección por "dengue" basándose en los síntomas descritos y en la información de que la persona afectada ha estado en un país de riesgo. El médico obtiene dicha información durante la consulta inicial con el paciente (anamnesis).

  • Medición de temperatura, pulso y presión arterial.
  • Escuchar los sonidos del corazón y los pulmones.
  • Palpación de los ganglios linfáticos superficiales.
  • Examen de la garganta y las membranas mucosas.

La sospecha de dengue se puede confirmar mediante análisis de sangre: se analiza una muestra de sangre del paciente para detectar el virus del dengue y anticuerpos específicos contra el patógeno. También se encuentran disponibles pruebas rápidas para detectar anticuerpos específicos.

Fiebre del dengue: curso de la enfermedad y pronóstico

Como regla general, el dengue sigue su curso sin complicaciones. La mayoría de los pacientes se recuperan en unos pocos días. Sin embargo, la fatiga puede persistir durante varias semanas.

Existe un mayor riesgo de complicaciones por el dengue en pacientes que no beben lo suficiente o que son menores de 15 años. También es peligrosa una segunda infección por el virus del dengue:

Riesgo de mortalidad

Especialmente en el dengue hemorrágico (DHF) y el síndrome de shock por dengue (DSS), el tratamiento médico intensivo oportuno es muy importante. La mortalidad (letalidad) en el dengue hemorrágico oscila entre el seis y el 30 por ciento. El DSS es aún más peligroso: sin el tratamiento adecuado, entre el 40 y el 50 por ciento de los pacientes mueren a causa de esta forma grave de dengue. Sin embargo, con un tratamiento oportuno, la mortalidad cae al uno por ciento o menos.