Síntomas Síndrome de enclaustramiento

Síntomas

Los síntomas que ocurren en el Síndrome de Enclaustramiento restringen la vida del paciente de la manera más masiva. La persona afectada no puede controlar su musculatura voluntaria. La parálisis afecta no solo a las extremidades, la espalda, pecho y estómago, pero también el cuello, garganta y músculos faciales.

No es posible hablar ni tragar de forma activa. Por tanto, el paciente suele tener que ser alimentado artificialmente. Casi todos los músculos oculares también se ven afectados por la parálisis, solo es posible el movimiento ocular vertical, que se puede utilizar como medio de comunicación.

El paciente no está en absoluto o apenas restringido en el pensamiento y la conciencia y percibe su entorno por completo. Para la persona afectada, esto significa mucho sufrimiento, porque aunque es plenamente consciente de su entorno, no puede interactuar con él. El paciente está expuesto a la situación sin poder hacer nada. Como resultado de esto condición, enfermedades psiquiátricas secundarias, como depresión., no son infrecuentes.

Terapia

Los cuidados intensivos y las medidas de enfermería integrales pueden mejorar los síntomas. Primero, la causa de la cerebro los daños deben eliminarse en la medida de lo posible. Entonces el cerebroSe debe confiar en gran medida en la capacidad de reconectar las células nerviosas y así restaurar la funcionalidad de varios cordones nerviosos.

Los diversos terapeutas deben trabajar en estrecha colaboración en esto. Los logopedas entrenan el habla con el paciente, los fisioterapeutas tratan de mantener la movilidad y permiten que el paciente realice sus propios movimientos lentamente. El concepto de terapia integral utilizado para mejorar la condición del Síndrome de Enclaustramiento también incluye psicoterapia y terapia ocupacional. Con mucha paciencia y trabajo, es posible una reducción de los síntomas de gran alcance, pero no se puede prometer. Hasta el momento, no existe ninguna opción de terapia quirúrgica o farmacológica.

Cuidar

Cuidar a una persona que sufre síndrome de enclaustramiento lleva mucho tiempo. Debido a la parálisis holística, se deben tomar todas las medidas de higiene al menos al comienzo de su fase de recuperación. Dado que no es posible una visita normal al baño y no se puede presionar ningún botón, generalmente se inicia un suministro de pañales, que se pueden reemplazar por un orinal durante el proceso de curación. Debido a la parálisis de la garganta y los músculos de la faringe, se producen más problemas en la atención.

El paciente ha perdido la capacidad de hablar y, por lo tanto, no puede comunicar sus necesidades. La comunicación solo es posible a través del movimiento de los ojos, lo que requiere mucha paciencia por parte del cuidador. Comprender el lenguaje del paciente es un proceso complejo que requiere mucha empatía.

Los músculos de la deglución también están paralizados, por lo que un dieta debe buscarse al principio. Esto se puede proporcionar a través de un estómago tubo o infusiones. La ventaja de alimentarse a través de un tubo gástrico es que el tracto gastrointestinal puede seguir realizando su función y se reduce el riesgo de enfermedades adicionales.