Síndrome metabólico: síntomas, causas, tratamiento

Síndrome metabólico (MetS) (sinónimos: Insulina síndrome de resistencia (IRS); síndrome metabólico; Síndrome de Reavan; síndrome X o cuarteto fatal; síndrome de abundancia; ICD-10-GM E88.9: trastorno metabólico no especificado; no existe una CIE-10 globalmente válida) se refiere a la presencia conjunta de los siguientes criterios, según Grundy:

Si se aplican tres de estos cinco criterios, síndrome metabólico está presente.

Para ayudar a los pediatras a evaluar el riesgo de síndrome metabólico en niños de 3 a 10 años, se encuentra disponible una herramienta en línea.

Además de los criterios anteriores, también suelen producirse los siguientes cambios:

  • Hiperuricemia - aumentado ácido úrico Niveles en la sangre.
  • Signos leves de inflamación en la sangre (como PCR ligeramente elevada - proteína C reactiva).
  • Hipercoagulopatía: aumento de la coagulabilidad de la sangre.
  • Disfunción endotelial: cambios en las paredes internas de los vasos, que pueden conducir a la formación de aterosclerosis (arteriosclerosis, endurecimiento de las arterias).

Los factores de manifestación cruciales del síndrome metabólico son comer en exceso y obesidad.

La proporción de sexos: hombres y mujeres es 1: 0.9.

Pico de frecuencia: la frecuencia del síndrome metabólico depende en gran medida del aumento de la edad y el peso corporal.

La prevalencia (incidencia de la enfermedad) varía del 17.7 al 21.1% en mujeres y del 21.4 al 22.7% en hombres (en Alemania) en las consultas de atención primaria. En Alemania, la prevalencia se estima en un 9%.

Evolución y pronóstico: Las actuales enfermedades parciales del síndrome metabólico deben tratarse de forma independiente. Sin embargo, el curso de la enfermedad depende en gran medida de qué tan bien el paciente elimina o minimiza al individuo factores de riesgo (obesidad; comportamiento dietético deficiente; falta de actividad física adecuada) asociado con el síndrome metabólico.Los individuos afectados tienen tres veces más probabilidades de desarrollar complicaciones cardiovasculares como infarto de miocardio (corazón ataque) o apoplejía (golpe).