Los síntomas de la invaginación intestinal | Invaginación

Los síntomas de la invaginación intestinal

La característica de una invaginación intestinal es el curso en fase de los síntomas. Al principio, el niño a menudo tiene calambres repentinos dolor abdominal, llora y parece enfermizo. Por lo general, esto es seguido por un período sin síntomas, que generalmente se interrumpe por los gritos agudos y repentinos del niño en relación con el levantamiento de las piernas o la adopción de una posición en cuclillas.

Puede haber un chorro vómitos con la sudoración, el niño se vuelve cada vez más letárgico y, en el peor de los casos, puede desmayarse. Estos síntomas indican una obstrucción intestinal (íleo) y el niño debe ser trasladado al hospital de inmediato. Debido a los síntomas característicos, rápidamente se levanta la sospecha de invaginación intestinal.

Tras el ingreso hospitalario, se debe fundamentar esta sospecha y otras enfermedades, como apendicitis or estreñimiento, debe descartarse. Durante el examen físico, se palpa una elevación cilíndrica, a menudo en el área de la parte inferior derecha del abdomen. En el 10-20% de los casos sangre se encuentra en el guante después del examen rectal con el dedo.

En ultrasonido En la imagen se aprecia una estructura de doble anillo (escarapela, fenómeno de tiro al blanco), que corresponde a la imagen en sección transversal de los dos conductos intestinales que se encuentran uno dentro del otro. Por tanto, el diagnóstico de invaginación intestinal ya está claro. En caso de duda, un Rayos X del abdomen (vista general del abdomen) con enema de contraste.

Esto tiene la ventaja de que, además del diagnóstico de imagen claro, la terapia se puede iniciar de inmediato. Para revertir el intestino invaginación, se intenta desplegar el intestino nuevamente con la ayuda del intestino (desvaginación). Para hacer esto, el aire o líquido se introduce en el colon a través de un tubo intestinal y la parte invertida del intestino (invaginar) es empujada hacia su posición original por la presión que viene hacia él.

An ultrasonido or de rayos X Se toma una imagen para comprobar esto. Esta terapia es más prometedora dentro de las primeras 14 horas, por lo que es importante llevar al niño al hospital rápidamente; si este método no funciona, la única opción restante es la cirugía (laparotomía). En este caso, se abre el abdomen y las partes intestinales se reposicionan manualmente.

Si el intestino ya está muy dañado debido a la reducción sangre flujo causado por la invaginación intestinal, la sección afectada debe ser extirpada (resección). Debido al peligro de una nueva invaginación intestinal, el niño debe permanecer en el hospital durante al menos 24 horas para observación, después de un tratamiento quirúrgico correspondientemente más largo.

  • Aire (desinvaginación neumática)
  • Solución salina (solución de NaCl) o
  • Medio de contraste soluble en agua (reducción hidrostática)

Una invaginación intestinal generalmente se desarrolla sin problemas con un tratamiento rápido y el niño vuelve a estar bien después de un corto tiempo.

El factor decisivo para el resultado de una invaginación intestinal es el tiempo durante el cual el segmento intestinal afectado no puede abastecerse con suficiente sangre. Cuanto más largo sea este tiempo, mayor será el riesgo de que la parte del órgano muera y surja una situación que ponga en peligro la vida del niño. Por tanto, es importante reconocer rápidamente una invaginación intestinal y tratarla rápidamente.