Discapacidad | Fisioterapia para el síndrome de ISG

Discapacidad

Como regla, un Síndrome de ISG se cura completamente por sí solo en unas pocas semanas si se trata de inmediato. Es posible que el médico le recete uno para la fase aguda, en la que el dolor es aún más fuerte. Este es especialmente el caso cuando el trabajo es muy físico y conlleva mucho estrés, la incapacidad real para trabajar ocurre con menor frecuencia, esto ocurre con mayor frecuencia cuando la articulación sacroilíaca está permanentemente inflamada y la lesión se ha vuelto crónica, por lo que las personas afectadas tienen que luchar con las quejas permanentes en la vida cotidiana y es posible que no puedan continuar con su trabajo. En tales casos, el médico a veces puede ordenar otras medidas de rehabilitación además de la fisioterapia, con el fin de reintegrar al paciente al mundo laboral.

Resumen

En resumen, el desarrollo de Síndrome de ISG se debe principalmente a una mala postura o problemas anatómicos. En el menor número de casos, el problema es causado por la actividad deportiva. Gracias a unas buenas medidas terapéuticas, normalmente se puede ayudar a las personas afectadas de forma rápida para que la lesión cicatrice sin problemas en poco tiempo.

Es importante obtener ayuda lo antes posible para evitar que la articulación se salga de forma permanente y cause daños a las estructuras circundantes. Especialmente si un Síndrome de ISG ya ha ocurrido en ti, pero también en todos los demás, es muy útil hacer los ejercicios fisioterapéuticos en casa con regularidad, para que se pueda minimizar el riesgo de lesión.