Estilos educativos

Definición

En psicología, pedagogía y sociología, los estilos educativos son actitudes y comportamientos característicos que los padres, educadores y otros educadores utilizan en su educación. Un estilo educativo se define como un complejo de prácticas y actitudes educativas que ocurren comúnmente. Hay estilos educativos muy diferentes. Los estilos educativos se han investigado desde el siglo XX. Desde entonces, los científicos han descrito diferentes estilos educativos.

¿Qué estilos de educación existen según Lewin?

Kurt Lewin es considerado uno de los pioneros más importantes de la psicología y fundador de la psicología social moderna. En la década de 1930, realizó experimentos de campo sobre los efectos de diferentes estilos educativos en el desempeño de los adolescentes. Junto con Ronald Lippit y Ralph K. White, Lewin estudió los siguientes estilos educativos: Estilo educativo autoritario Estilo educativo democrático Estilo educativo de laissez-faire Este concepto de tres estilos de liderazgo y educación sirvió y sirve para asignar a los educadores a un tipo. El plan estaba destinado a ayudar a los educadores a tomar conciencia de su propio estilo educativo y a repensar su comportamiento educativo en determinadas circunstancias. Nuestro próximo artículo también puede ser de su interés: Niñera

  • Estilo autoritario de crianza
  • Estilo de educación democrático
  • Estilo de crianza de laissez-faire

Estilo autocrático

El estilo de educación autocrático es similar al estilo autoritario y, en principio, es una mejora del mismo. Los padres determinan las actividades para sus hijos y se aseguran de que todo se implemente en consecuencia. Los padres exigen absoluta obediencia a los hijos.

En el hogar hay reglas estrictas y los niños básicamente no tienen derecho a una explicación de las reglas. Esto significa que los niños no aprenden por qué se debe hacer algo y cómo. Un estilo de educación autocrático se basa en la obediencia ciega y la aceptación absoluta. Desafortunadamente, esto lleva al hecho de que los niños apenas desarrollan creatividad o iniciativa. A menudo, los niños criados de forma autocrática desarrollan complejos de inferioridad y tienden a reducir su inseguridad a través de la agresión debido a la falta de confianza en sí mismos.