Centro respiratorio: estructura, función y enfermedades

El centro respiratorio es la parte del cerebro que controla ambos inhalación y exhalación. Se encuentra en el bulbo raquídeo y consta de cuatro subunidades. La disfunción del centro respiratorio puede ocurrir como resultado de enfermedades neurológicas, lesiones y envenenamiento, entre otras condiciones, o puede estar asociada con otras enfermedades.

¿Qué es el centro respiratorio?

El centro respiratorio es una unidad funcional en el cerebro ubicado en el bulbo raquídeo, el bulbo raquídeo. Debido a su enorme importancia, los médicos originalmente se refirieron al centro respiratorio como el nodo vital (nodus vitalis). Su función es controlar respiración, que es esencialmente involuntario; sin embargo, los humanos son capaces de controlar inhalación y exhalación, hasta cierto punto, conscientemente. En 1811, el médico y fisiólogo francés Julien Jean Legallois fue el primero en describir esta parte del cerebro. Como muchas funciones cerebrales, el centro respiratorio se descubrió comparando tejido sano y dañado. Legallois descubrió, con la ayuda de experimentos con animales, que las lesiones en un área específica del bulbo raquídeo Lead a la inhibición de involuntaria respiración.

Anatomía y estructura

El centro respiratorio se encuentra en el bulbo raquídeo y no es una estructura anatómica única. En cambio, es una unidad funcional compuesta por diferentes neuronas. Estos pertenecen a diferentes grupos, pero están estrechamente interconectados a través de sinapsis. La medicina distingue cuatro subgrupos: el grupo respiratorio dorsal, el grupo respiratorio ventral, el centro neumotáctico y el centro apneustico. Las diferentes unidades representan diferentes funciones y tareas. El grupo respiratorio dorsal se extiende longitudinalmente a través del bulbo raquídeo, con la mayoría de las neuronas ubicadas en el tracto solitario. Este grupo es una red sin fronteras fijas. El grupo respiratorio ventral rodea al grupo respiratorio dorsal lateralmente y en dirección torácica; de nuevo, sin embargo, estas no son estructuras claramente delineadas. Tanto el centro neumotáxico como el centro apneustico se ubican en el puente (protuberancia): este último está en la parte inferior, mientras que el centro neumotáxico se ubica encima de él.

Función y tareas

Involuntario inhalación y la exhalación dependen del centro respiratorio; funcionalmente, se pueden distinguir cuatro pasos en el proceso respiratorio. Cada uno de los diferentes grupos de neuronas dentro del centro respiratorio realiza solo funciones específicas. El grupo respiratorio dorsal es el principal responsable del ritmo de respiración. La inhalación, con una duración de aproximadamente dos segundos, es más corta que la exhalación, que dura aproximadamente 3 segundos. Para la inspiración, el grupo respiratorio dorsal envía señales a los músculos respiratorios, que luego facilitan activamente la inhalación. Para la exhalación pasiva, el centro respiratorio no necesita generar su propia señal. Por el contrario, el grupo respiratorio ventral del centro respiratorio es necesario para la respiración forzada, que puede acelerar o forzar tanto la inhalación como la exhalación. El centro neumotáctico en la protuberancia controla una parte del proceso respiratorio del que muchas personas no son conscientes: detiene la inhalación, lo que ayuda a controlar el máximo. volumen de aire en los pulmones. La apnea es el término médico para la contraparte de este proceso: el centro apneustico del centro respiratorio provoca breves inhalaciones violentas, como en las respiraciones jadeantes. Después de una retención prolongada de la respiración, un gran esfuerzo o en otras situaciones estresantes, la apneusis de esta manera ayuda a asegurar el cuerpo oxígeno suministro.

Enfermedades

Uno de los trastornos respiratorios más conocidos es hiperventilación, en el que los pacientes inhalan y exhalan rápidamente. Como resultado, los síntomas pueden incluir mareo, alteraciones visuales, sensación de asfixia, sensación de pánico y síntomas cardiovasculares. La hiperventilación puede ocurrir como parte de síntomas físicos y psicológicos, con causas físicas que incluyen un aumento agudo oxígeno demanda y condiciones tales como golpe (apoplejía), lesión cerebral traumática, encefalitis, y otros incidentes cerebrales. La hiperventilación como síntoma psicológico es particularmente característico de los ataques de pánico y ansiedad. depresión. or dolor Los trastornos también son más propensos a la hiperventilación que otros individuos. La disnea es un trastorno respiratorio severo que puede ser fatal si no se trata y se caracteriza por un número reducido de respiraciones, y los individuos afectados toman solo una pequeña cantidad de aire en los pulmones por respiración. La disnea ocurre naturalmente a menudo antes de la muerte y patológicamente puede preceder a un paro respiratorio completo. En caso de paro respiratorio, la respiración se detiene por completo, pero puede reanudarse en algunas circunstancias; la causa específica es el factor más importante. Las posibles causas de paro respiratorio incluyen enfermedad neurológica, envenenamiento, parálisis de los músculos respiratorios, ciertas fuerzas externas como estrangulamiento, trauma médico, accidentes eléctricos y complicaciones anestésicas. El cese temporal de la respiración durante al menos 10 segundos durante el sueño caracteriza apnea del sueño or síndrome de apnea del sueño. Otros síntomas potenciales incluyen sueño inquieto, aumento de la sudoración nocturna, aumento de la micción durante el sueño (nicturia), dificultad para dormir durante la noche y episodios de microsueño. Al despertar, mareo y dolores de cabeza puede ocurrir. Además, apnea del sueño a menudo se manifiesta en signos que afectan el rendimiento mental, por ejemplo, concentración problemas y estado de ánimo deprimido. El consumo de drogas, obesidad (adiposidad) y las enfermedades neuronales se encuentran entre las causas más comunes. El tratamiento varía según la causa, pero se necesita con urgencia, especialmente en casos graves, para evitar daños físicos secundarios por oxígeno deficiencia. Otros trastornos respiratorios incluyen sonidos respiratorios (estridor), respiración lenta, respiración periódica, boca respiración, hipo (singultus) y estornudos.