Laringoscopia: tratamiento, efecto y riesgos

Como con todas las endoscopias, el propósito de la laringoscopía es visualizar órganos internos, tales como el laringe, con fines de examen. Especialmente en el caso de laringe, no se puede prescindir de la duplicación, ya que los métodos alternativos como los rayos X no pueden obtener imágenes de la laringe de la manera que se requiere para detectar enfermedades del mucosa de la laringe.

¿Qué es la laringoscopia?

La laringoscopia implica ver el interior de la laringe a través de un procedimiento endoscópico. La laringoscopia implica observar el interior de la laringe de una persona. Las razones por las que esto es necesario pueden variar. Debido a que es indoloro y generalmente no tiene efectos secundarios, incluso los primeros signos de una enfermedad de la laringe pueden ser motivo para examinarla más de cerca durante una laringoscopia. Un persistente ronquera que no desaparece por sí solo después de unos días puede ser una de estas razones. Lo mismo se aplica a dolor en la garganta y la faringe, que a menudo se acompaña de penetración el mal aliento y se considera una señal segura de que un inflamación de la laringe podría estar presente.

Función, efecto y objetivos

Finalmente, la laringoscopia se usa para detectar la formación de tumores en una etapa temprana, de modo que se puedan iniciar contramedidas como la extirpación quirúrgica lo más rápido posible. Se recomienda a los fumadores, en particular, que visiten regularmente su oído, narizy médico de garganta (ENT) para un chequeo preventivo, con el fin de que le realice una laringoscopia. El motivo de esta recomendación es el mayor riesgo en los fumadores de desarrollar un tumor de laringe. Por tanto, los exámenes preventivos son tanto más urgentes en este caso. Como ya se mencionó, la laringoscopia la realiza un médico otorrinolaringólogo, ya que se especializa en ella como parte de su formación práctica. Se hace una distinción médica entre laringoscopia directa e indirecta. La laringoscopia indirecta, que realizan los médicos otorrinolaringólogos con mucha más frecuencia que la laringoscopia directa, se utiliza principalmente para examinar las secciones frontales de la laringe. Para hacer esto, el médico sostiene al paciente lengua con una mano y utiliza la otra para operar el llamado laringoscopio. Este instrumento médico es un pequeño espejo redondo sujeto al extremo superior de un alfiler de metal. Esto le permite al médico examinar la laringe incluso en lugares donde no puede mirar debido al ángulo. La laringoscopia indirecta no requiere preparación por parte del paciente. La laringoscopia directa es más difícil en comparación. En primer lugar, el paciente no debe estar consciente. Esto significa que se administra un anestésico antes de que comience el examen. Entonces el paciente cabeza está ligeramente inclinado hacia atrás. Para evitar que los instrumentos de metal dañen los dientes durante el examen, se le da al paciente un boca Guardia. Luego se inserta un tubo de metal hueco a través del boca a la parte superior entrada de la laringe y se fija allí. A través de este tubo, el médico luego inserta su endoscopio; un "instrumento en forma de tubo" con una cámara instalada en el extremo superior que le permite al médico examinar la laringe en un monitor. Si detecta áreas sospechosas que se desvían de lo normal mucosa, el médico puede tomar muestras de tejido con su endoscopio mientras la laringoscopia directa aún está en curso y luego enviarlas al laboratorio para examen histológico, es decir, análisis de tejido fino de la muestra de mucosa. La laringoscopia directa tarda entre 15 y 30 minutos, según el caso.

Riesgos, efectos secundarios y peligros

Por lo general, no hay riesgos asociados con la laringoscopia directa o indirecta. Solo la circunstancia de que el médico dañe accidentalmente la laringe durante la evaluación podría cuestionarse como un posible riesgo, aunque esta es la excepción más rara. Se necesitarían fuerzas mayores para dañar la laringe y sus cuerdas vocales, lo que podría ser intencional en lugar de accidental. En el caso de la laringoscopia directa, también existen posibles efectos secundarios en forma de sensibilidad al anestésico administrado.