Personas mayores: mantenerse en forma con rehabilitación

Incluso en la vejez, no todo tiene por qué ser siempre cuesta abajo. Aquellos que se mueven tanto como sea posible dentro de sus capacidades pueden lograr mejoras notables.

Los accidentes cerebrovasculares o las caídas que provocan fracturas de huesos privan a muchas personas mayores de su movilidad, al menos temporalmente. Incluso un breve período de inactividad tiene un efecto negativo en el cuerpo y la mente, especialmente en la vejez. Las personas mayores corren el riesgo de volverse permanentemente dependientes de apoyo y cuidados.

Sin embargo, una enfermedad repentina y grave no tiene por qué significar el fin de una vida independiente en casa. La rehabilitación puede ayudar a encontrar una salida a la temida calle de sentido único que va del hospital a una residencia de ancianos. El objetivo es vivir de forma independiente, posiblemente con el apoyo de servicios de atención ambulatoria.

Mantener la independencia

Para las personas que todavía están trabajando, la rehabilitación debería permitirles principalmente volver a su trabajo habitual. Sin embargo, con la edad los objetivos cambian. El objetivo ahora es recuperar, mejorar o mantener la vida independiente en el propio hogar (competencia cotidiana). El objetivo es reducir o prevenir la necesidad de cuidados.

Opciones de rehabilitación

Además, las personas mayores deben poder llegar por sí mismas a la clínica de día o a un centro de rehabilitación para pacientes ambulatorios cerca de su domicilio, con la ayuda de familiares o de un servicio organizado de recogida y entrega. La rehabilitación ambulatoria suele limitarse a 20 días de tratamiento. Si durante este tiempo no se logra el objetivo de tratamiento especificado, puede solicitar a la compañía de seguros una extensión durante la rehabilitación.

El camino a la rehabilitación

Cuanto antes comience la rehabilitación, por ejemplo después de un derrame cerebral, más éxito promete ser. Antes de elegir un centro de rehabilitación, debe obtener la aprobación de su compañía de seguro médico. Normalmente, el médico que le atiende en el hospital presentará una solicitud.

Las solicitudes de rehabilitación también pueden ser presentadas por médicos en ejercicio privado o previa evaluación del Servicio Médico de las Cajas del Seguro de Enfermedad (MDK). En el caso del seguro de asistencia privado, esto lo realiza Medicproof. Los servicios sociales del hospital, la compañía de seguro médico o portales especiales de Internet pueden ayudarle a elegir un centro de rehabilitación adecuado.

La rehabilitación vale la pena:

  • Ocho semanas de entrenamiento con equipos de fitness pueden aumentar de forma mensurable la fuerza muscular incluso en personas de entre 65 y 95 años*.
  • Los participantes capacitados en el estudio también reaccionaron con menos ansiedad ante los nuevos desafíos.

equipo de terapia

La edad media de los pacientes en rehabilitación geriátrica ronda los 80 años. Además de su enfermedad principal, los pacientes casi siempre tienen condiciones adicionales que también requieren tratamiento. A esta colorida mezcolanza de diferentes trastornos de salud se suma un equipo de tratamiento igualmente colorido: médicos, enfermeras, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, logopedas, pedagogos sociales, psicólogos y nutricionistas trabajan mano a mano.

Después de los primeros días del tratamiento de rehabilitación, se establecen objetivos específicos para cada paciente de rehabilitación (evaluación geriátrica): esto significa que los proveedores del tratamiento se centran menos en el diagnóstico y más en las deficiencias existentes. Todos los miembros del equipo de tratamiento informan qué discapacidades y problemas han descubierto en su área. El potencial de rehabilitación se determina conjuntamente y se celebran reuniones semanales para comprobar si se pueden alcanzar los objetivos.

Motivación: el principio y el fin de todo

Preparación para el hogar

Durante la terapia, los fisioterapeutas y terapeutas ocupacionales proporcionan a los pacientes, en la medida de lo necesario, ayudas adaptadas individualmente. Los terapeutas también familiarizan a los familiares con las discapacidades y con ayudas como la silla de ruedas o el andador.

Terapeutas ocupacionales o pedagogos sociales acompañan al paciente una vez en su domicilio. Se comprueba si determinadas ayudas podrían facilitar la vida en el hogar o si son necesarias medidas de reconversión (adaptación del hogar). Sin embargo, este nombramiento local también puede revelar que el regreso al entorno hogareño actual plantea un riesgo de seguridad demasiado alto.

Se establece una red de seguridad para pacientes ambulatorios a tiempo antes del alta para garantizar una atención médica, de enfermería y doméstica suficiente en el hogar.

No dejes que

Los familiares juegan un papel muy importante. El reconocimiento y el estímulo fortalecen la motivación y la confianza en uno mismo más allá de la estancia de rehabilitación. Para que los objetivos de rehabilitación alcanzados sean sostenibles a largo plazo, los ejercicios aprendidos también deben convertirse posteriormente en parte integral de la rutina diaria.

Los fisioterapeutas, por ejemplo, deberían revisar esta terapia de seguimiento independiente a intervalos más largos.