Acromegalia: síntomas, causas, tratamiento

In acromegalia (sinónimos de tesauro: Artritis en acromegalia; Artropatía en acromegalia; Hipersecreción de somatotropina; Hipersecreción de hormona del crecimiento; Gigantismo hipofisario; Gigantismo hipofisario; Hiperplasia de la hipófisis anterior con acromegalia; Hiperplasia pituitaria anterior con gigantismo; Hiperplasia de la hipófisis anterior con gigantismo; Enfermedad de Marie-Pierre I; Síndrome de Marie-Pierre I; Sobreproducción de somatotropina; Sobreproducción de hormona del crecimiento: ICD-10-GM E22. 0: Acromegalia e hipercrecimiento pituitario), hay un aumento en el tamaño de las extremidades terminales del cuerpo o acra. Esto se refiere a las partes que sobresalen del cuerpo, como las manos y los pies, el mentón y mandíbula inferior, orejas, nariz, protuberancias sobre los ojos y genitales.

Por sobreproducción de crecimiento hormonas (Hormona de crecimiento humano (HGH), GH; somatotropina; hormona somatotrópica (STH)) en el lóbulo pituitario anterior (HVL), se producen los siguientes cambios en la infancia o la edad adulta. Por tanto, es una enfermedad endocrinológica.

In la infancia, un exceso de STH antes del cierre de la epifisía articulaciones (placas de crecimiento) conduce a gigantismo proporcionado (gigantismo pituitario; pronunciado estatura alta; los pacientes suelen alcanzar una altura de> 2 m).

En adultos, es decir, una vez completado el crecimiento fisiológico, la producción excesiva de STH se manifiesta exclusivamente en el cabeza, acrasacromegalia) y órganos viscerales (órganos del abdomen).

Pico de frecuencia: la enfermedad se presenta predominantemente entre los 45 y los 50 años de vida.

En Alemania, la acromegalia afecta aproximadamente de 3,000 a 6,000 personas.

La incidencia (frecuencia de nuevos casos) es de unos 3-5 casos por 1,000,000 de habitantes por año (en Alemania).

Evolución y pronóstico: si no se trata, la enfermedad se asocia con una esperanza de vida más corta de 10 años. Esto se debe a complicaciones cardiovasculares y cerebrovasculares (que afectan al sistema cardiovascular y del cerebro) así como una mayor incidencia de mama y colon células cancerosas. Si se puede normalizar el sistema de la hormona del crecimiento IGF-1, el pronóstico mejora.