Riesgos del tratamiento | Síndrome de KiSS

Riesgos del tratamiento

Dado que solo se utilizan movimientos manuales leves y una presión mínima en el tratamiento de Síndrome de KiSS, las complicaciones son muy poco probables. El mayor problema, que la medicina ortodoxa en particular considera riesgoso, es el riesgo de pasar por alto una enfermedad grave del niño, ya que se basa en el diagnóstico de Síndrome de KiSS y no se proporciona ninguna aclaración adicional de los síntomas. Los médicos alternativos estiman que el período hasta que la terapia surta efecto es de aproximadamente dos semanas.

Sin embargo, si no es Síndrome de KiSS, se puede perder un tiempo valioso tratando la causa real. En general, el beneficio del tratamiento no se reconoce en la medicina convencional, ya que ningún estudio ha podido demostrar una mejora. De manera similar, el síndrome de KiSS no se reconoce debido a la falta de evidencia.

¿Quién cubre los costos del tratamiento?

Los costes del tratamiento de un síndrome de KiSS varían enormemente y pueden ascender a entre 50 y 400 euros por tratamiento, dependiendo del terapeuta o médico alternativo. Las agencias de ayuda, los seguros adicionales o los seguros privados suelen cubrir los costes del quiro - o tratamientos terapéuticos manuales. Si el niño está cubierto por una ley salud seguro, los gastos correrán a cargo de los propios padres. Esto a menudo conduce a una enorme carga financiera que no todas las familias pueden soportar fácilmente.

¿Qué tan alto es el éxito del tratamiento?

El tratamiento temprano del síndrome de KiSS es muy eficaz con la ayuda de osteopatía o terapia manual. Los padres a menudo informan una mejora significativa en los síntomas después de unas pocas aplicaciones. Los niños se vuelven más tranquilos, no gritan tanto, parecen más relajados y muestran los primeros cambios de postura. Como regla general, son necesarias varias sesiones de aproximadamente 30 a 45 minutos durante 2-3 semanas para lograr el éxito a largo plazo.

¿Puede empeorar después de un tratamiento?

El tratamiento temprano del síndrome de Kiss suele ser muy exitoso. Sin embargo, después de las primeras aplicaciones, puede haber un período de transición en el que los síntomas empeoren significativamente. En un período de aproximadamente 2 semanas después de la finalización del tratamiento, puede producirse la denominada fase de reacción. Durante esta fase, los síntomas de la dolencia empeoran, ya que el organismo del niño primero tiene que adaptarse a las nuevas condiciones y trata de compensar las malposiciones y malas posturas que prevalecían anteriormente. Este proceso de transición puede aparecer inicialmente como una clara regresión, pero a largo plazo conduce a una mejora consolidada y estable de las quejas.