Prueba de demencia

El diagnóstico de incipiente demencia puede resultar difícil si el paciente se niega a cooperar. Dado que la mayoría de las personas con demencia Inicialmente se dan cuenta de que algo anda mal, muchos de ellos intentan evitar situaciones desagradables utilizando una variedad de estrategias de evitación. Para poder realizar un diagnóstico de sospecha de demencia, se deben incluir las declaraciones del paciente y todos los demás informantes disponibles.

Los familiares o amigos, que se encuentran en el entorno constante del paciente, suelen ser de gran ayuda. Si es necesaria una visita al médico, el especialista tiene varias opciones abiertas para él. Los diagnósticos pueden realizarse en el laboratorio y apoyados por técnicas de imagen como la ecografía, EEG, TC o MRT. Por otro lado, se deben utilizar procedimientos de prueba neuropsicológicos, ya que son menos estresantes para el paciente, mientras que las formas de prueba son altamente estandarizadas y significativas. En el contexto de la detección rápida de los déficits cognitivos, como ocurren en pacientes con demencia, se han desarrollado una serie de exámenes de prueba, algunos de los cuales son particularmente importantes.

Mini prueba de estado mental (MMST)

El MMST se desarrolló para proporcionar un procedimiento de detección simple para la evaluación de los déficits cognitivos en la práctica clínica diaria. Desde su introducción en 1975, el MMST ha demostrado ser un procedimiento de prueba muy confiable. Es la herramienta de diagnóstico más utilizada en el diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer y demencia

El MMST es ideal para medir la gravedad de la enfermedad y para monitoreo el progreso de la terapia existente. Los déficits cognitivos se evalúan en un área grande utilizando un sistema de 30 puntos y se examinan las siguientes habilidades: orientación, memoria, concentración y aritmética, habla, comprensión, audición y seguimiento de instrucciones, y rastreo. La mini prueba del estado mental dura aproximadamente 15 minutos y debe ser realizada por asistentes médicos o personal calificado.

Primero se pregunta al encuestado sobre su orientación temporal. Se debe indicar la fecha y el día de la semana, así como el año, mes, día y estación. Si resulta evidente que el encuestado está orientado al tiempo y conoce directamente la fecha correcta, no es necesario solicitar información más precisa.

El encuestado recibe un punto por cada hecho individual. El examen de la orientación espacial es similar. Aquí, se hace referencia a la localización actual del entrevistado preguntándole sobre el país y el estado, la ciudad, la institución y el piso en el que se encuentra.

Luego, al encuestado se le dan tres palabras simples (por ejemplo, automóvil, flor, vela). Debería repetirlos directamente y mantenerlos a corto plazo. memoria por un momento. A continuación, se realiza un sencillo ejercicio aritmético en el que se pide al encuestado que reste 7 de 100.

Del resultado 7 se debe restar nuevamente y así sucesivamente. Hasta 65 se evalúa el cálculo. Si el entrevistado no da el resultado correcto, este se le entrega para que pueda continuar con la tarea.

Si el encuestado no puede completar el cálculo con éxito, la palabra "radio" se puede escribir alternativamente al revés. En ambos casos se comprueba la concentración del encuestado. Después de la tarea intermedia, el memoria se completa la prueba.

Para ello, se pide al entrevistado que repita las palabras que acaba de memorizar (por ejemplo, coche, flor, vela). Por cada término que se recuerda, la persona de prueba recibe un punto. Posteriormente, las habilidades lingüísticas se evalúan nombrando un reloj de pulsera y un lápiz y repitiendo cualquier oración.

A esto le siguen algunas instrucciones en forma oral, que son formuladas por el evaluador. Por ejemplo, el paciente debe tomar una hoja de papel en la mano y doblarla. La puntuación máxima a alcanzar es de 30 puntos.

Por cada subtarea completada, la persona que realiza la prueba recibe un punto. Según la literatura, el valor umbral para la demencia se encuentra entre 24 y 26 puntos. En este contexto, es aconsejable tener en cuenta la competencia y las declaraciones cotidianas del paciente y las vivencias de los familiares para realizar un diagnóstico orientado a objetivos.

Si la puntuación está por debajo de 23/24 puntos, es muy probable que exista demencia. El valor umbral para la demencia moderada se da en 20 puntos y para la demencia grave en 10 puntos. Los medicamentos contra la demencia, medicamentos que contrarrestan la demencia, son pagados por salud compañías de seguros desde menos de 24 puntos y hasta 10 puntos.

Evaluación y crítica: la prueba toma solo un corto tiempo para realizar y evaluar y mantiene la carga sobre el paciente lo más baja posible: claras ventajas de este procedimiento de detección. La prueba cubre varios criterios de diagnóstico a la vez y se puede realizar incluso en los casos de la más mínima sospecha. Además, el curso de la enfermedad se puede controlar con la terapia utilizada.

Una desventaja es la baja sensibilidad del procedimiento de prueba para la demencia leve. Esto significa que solo unos pocos pacientes que se encuentran en las primeras etapas de la enfermedad obtienen resultados positivos. Además, una buena puntuación en algunas tareas puede ocultar el fracaso en otras.

El MMST es muy susceptible a influencias perturbadoras. La entrevista debe realizarse en un ambiente tranquilo y comprensivo. Proporciona una descripción general aproximada de los déficits existentes, pero no permite un diagnóstico exacto.

Para ello, deben realizarse más pruebas. En el pasado ha sucedido que las personas deprimidas han tenido un mal resultado en el MMST. En el caso de graves depresión., puede producirse un deterioro cognitivo, que debe diferenciarse de la demencia.