Nutrición para el hígado graso

Definición

A hígado graso (estetatosis hepática) generalmente se conoce como un almacenamiento de grasa potencialmente reversible en las células del hígado (hepatocitos). Por lo tanto, este depósito de grasa aún puede revertirse. UNA hígado graso puede tener varias causas, como el consumo crónico de alcohol o causas no alcohólicas (enfermedad del hígado graso no alcohólico) como trastornos del metabolismo de los lípidos, sobrenutrición, obesidad y diabetes mellitus tipo 2.

La esteatohepatitis, en la que también hay signos de inflamación, debe distinguirse de esta. Otro término que se distingue de éste es alcohólico. hígado graso enfermedad. Este término se utiliza a menudo erróneamente como sinónimo de grasa hígado, pero no se refiere a un solo cuadro clínico, sino que abarca un grupo de enfermedades. Estos incluyen grasas simples hígado, pero también hígado graso hepatitis (esteatohepatitis), hígado cirrosis y carcinoma hepatocelular. El siguiente artículo se centrará en el hígado graso y los aspectos especiales de la nutrición que deben tenerse en cuenta al tratar el hígado graso.

¿Qué debería considerar?

La presencia de hígado graso representa un grave condición del hígado, que puede ser causado por varios factores. Un hígado graso puede ser causado por un consumo excesivo de alcohol, síndrome metabólico, sobrenutrición y exceso de peso, u otras condiciones preexistentes. En general, la mortalidad de pacientes con hígado graso hepatitis, que puede resultar de hígado graso, y las enfermedades secundarias resultantes son más altas que en la población normal sana.

Tales enfermedades secundarias pueden, por ejemplo, afectar la corazón y el sistema vascular. Para esto, el riesgo es muy alto, en particular con pacientes con abuso de alcohol, un síndrome metabólico Y asociados exceso de peso. Otras enfermedades secundarias, como cirrosis del hígado o una enfermedad tumoral del hígado (carcinoma hepatocelular) también puede desarrollarse en la base de un hígado graso. Por lo tanto, se recomienda aclarar la causa del hígado graso y minimizar los factores de riesgo tanto como sea posible. Pacientes cuyo hígado graso se puede atribuir originalmente a su dieta o al menos parcialmente a su dieta debe prestar especial atención a esto.