Marca de nacimiento en el niño | Picazón en las marcas de nacimiento

Marca de nacimiento en el niño

En los niños es particularmente importante diferenciar con precisión si toda la piel pica y / o duele o solo la piel mancha de nacimiento está directamente irritado. Esta distinción no siempre es fácil de hacer. Especialmente en los niños más pequeños, que aún no pueden expresarse con la suficiente precisión, la localización del dolor a menudo permanece vago.

En principio, la fricción también puede ser un impulso para que el niño se rasque. Por lo tanto, se debe observar el comportamiento del niño y las situaciones en las que se produce el picor lo más de cerca posible. El niño (como los adultos, por supuesto) debe intentar no rascarse si es posible para evitar una mayor irritación.

Luego, un dermatólogo puede decidir si, en el caso individual, hay una enfermedad de la piel que debe tratarse o si existe incluso un tumor sospechoso. Sin embargo, este último es extremadamente raro en los niños. En la mayoría de los casos, degenerativos cambios en la piel solo ocurren con la edad.

Las causas más frecuentes de picazón en los niños son eczema o un reacción alérgica de la piel, que antes se desconocía. Para combatir el picor agudo, conviene lavar al niño con jabones de pH lo más neutro posible y utilizar lociones corporales hidratantes con la menor cantidad posible de ingredientes artificiales, ya que la piel de los niños sigue siendo especialmente sensible y se pueden considerar aditivos de todo tipo. alérgenos de contacto. Cada el embarazo se acompaña de importantes cambios hormonales en el cuerpo de la futura madre.

En el curso de estos cambios, es posible que bajo ciertas circunstancias haya una mayor formación de nuevos lunares. En primer lugar, esto no es peligroso ni preocupante; estas son marcas de nacimiento normales y adquiridas. Para protegerse en lo siguiente de pre-etapas malignas y similares asociadas con la piel células cancerosas, los lunares recién formados deben protegerse de la luz solar directa, así como de otros que han estado presentes durante un período de tiempo más largo, y deben evitarse las visitas a los solariums. Sin embargo, en promedio, los lunares más benignos cambian durante el período de el embarazo hacia estadios o tipos precancerosos malignos. Por lo tanto, las mujeres embarazadas deben estar atentas, observar sus lunares y consultar a un dermatólogo sin demora en caso de signos como picazón, cambios de forma o dolor.