La férula Hallux rigidus

La férula Hallux rigidus

A menudo, la última posibilidad de tratar un de remolque rígida apropiadamente es la cirugía. Al final de este procedimiento, generalmente se inserta un alambre longitudinalmente en el pie para sostener al operado. articulación metatarsofalángica del dedo gordo del pie durante los primeros días y semanas de recuperación y para asegurar la posición del dedo, pero esto a menudo no es suficiente. En muchos pacientes, las deformaciones en el área de la articulación vuelven a ocurrir después de todo o el proceso de vuelco sigue siendo doloroso.

Para evitar esto, algunos médicos prescriben un Hallux rigidus férula para sus pacientes después de la cirugía. Esta férula se aplica alrededor del articulación metatarsofalángica del dedo gordo del pie, que normalmente puede ser realizado fácilmente por el propio paciente sin ayuda médica. La estrechez de la Hallux rigidus La férula se puede variar de acuerdo con los requisitos individuales con la ayuda de cierres de velcro.

Su propósito es prevenir una curvatura progresiva de la articulación y aliviar la articulación. Algunos pacientes encuentran incómodo el uso de una férula de este tipo. Por un lado, ejerce una presión considerable sobre la articulación del dedo del pie ya dañada y, por otro lado, normalmente es difícil llevarlo en un zapato.

Por este motivo, se suele recomendar el uso de la férula Hallux rigidus durante la noche o, por el momento, solo por horas durante el día para acostumbrarse. En la mayoría de los casos, la férula, que está disponible en las tiendas de suministros médicos habituales y también en Internet, se prescribe durante unos 3 meses. Sin embargo, también hay pacientes que los llevan más de medio año.

En estos pacientes, sin embargo, se debe tener cuidado de cambiar la férula después de aproximadamente 3 meses. El beneficio de una férula para hallux rigidus aún no se ha probado definitivamente (en contraste con su uso para el cuadro clínico similar de hallux valgo) y sigue siendo controvertido. No todos los cirujanos y cirujanos ortopédicos informan a sus pacientes sobre esta posibilidad y emiten automáticamente una receta para una férula. Sin embargo, si se tiene la sensación de que la articulación operada vuelve a estar ligeramente desplazada, es recomendable comentarlo con el médico y si una persona afectada manifiesta el deseo de llevar una férula, se suele cumplir.