Estreñimiento en el bebé | Evacuación intestinal en el bebé

Estreñimiento en el bebé

Estreñimiento es un problema común en bebés y niños. Hay varias causas posibles. La causa más inofensiva es el denominado trastorno funcional.

No se puede identificar ninguna causa orgánica. Los trastornos funcionales pueden tratarse con confianza utilizando los medios y métodos ya mencionados. También son inofensivos estreñimiento causado por malos hábitos alimenticios: muy poco líquido; muy poca fibra, si ya se ha alimentado.

Aquí los hábitos deben adaptarse. Cambios en dieta también puede conducir a estreñimiento. Esto puede ser al cambiar de la leche materna a la fórmula de alimentos o al comenzar a alimentar además de la fórmula.

También existen causas secundarias: inflamación del ano, ragades o fisuras, es decir, lágrimas, pueden hacer que el bebé no lactato debido a dolor. Si el bebé ya está tomando medicamentos, especialmente para epilepsia, estos también pueden provocar estreñimiento. En casos raros, las causas orgánicas pueden ser la causa. Enfermedades como Enfermedad de Hirschsprung u otros trastornos neurológicos pueden dificultar el paso intestinal y obstruirlo. Enfermedades metabólicas como hipotiroidismo y las malformaciones congénitas también pueden causar estreñimiento.

Diarrea en el bebé

Los lactantes suelen tener heces especialmente blandas; esto no debe confundirse con diarrea, que es líquido y aumenta en frecuencia. Las heces pueden tomar diferentes colores e incluso hincharse fuera del pañal. Sin embargo, es importante prestar atención a sangre y moco.

En estos casos se debe consultar al pediatra. Las reacciones alérgicas o las intolerancias alimentarias también pueden provocar diarrea. Si el bebé ha probado algo nuevo o ha comido algo sospechoso, debe comprobarlo.

Las reacciones alérgicas también pueden causar prurito y picazón en la piel, que se consideran una indicación. Infeccioso diarrea en los lactantes es causada por una infección viral en el 70% de los casos. Esto significa que el tratamiento es sintomático.

Antibióticos son ineficaces en este caso. Es importante asegurarse de que el bebé continúe recibiendo suficiente líquido y, si es posible, también coma algo de comida, aunque esto puede ser más difícil en el caso de diarrea vómitos. Si el bebé se vuelve cada vez más flácido y somnoliento, se debe consultar a un pediatra o, si es necesario, a una clínica pediátrica.

La diarrea sanguinolenta con moco sugiere una diarrea bacteriana. En este caso, se debe consultar a un pediatra o una clínica con bastante rapidez para poder combinar la terapia antibiótica y sintomática. Si la diarrea es leve y el niño está bien condición sin diarrea con mucosidad sanguinolenta, puede esperar unos 2 días para ver si la diarrea mejora.

Si la diarrea mejora o incluso desaparece, no es absolutamente necesario consultar a un médico. Si la diarrea persiste durante un período de tiempo más prolongado (más de 3 semanas), también se deben considerar las enfermedades de órganos y metabólicas; En cualquier caso, debe realizarse una visita a un médico.