Dolor con contusión costal

Introducción

Contusión de la Costillas (contusión de costilla) es causado por la aplicación de una fuerza contundente, por ejemplo, por un golpe o una caída. No hay fractura aquí. Solo el tejido conectivo rodeando el Costillas, músculos, los nervios y el periostio puede dañarse o irritarse.

A menudo, un accidente de este tipo en los deportes es causado por una patada, un golpe o una caída, por ejemplo, en artes marciales, balonmano o fútbol. Montar a caballo, esquiar o andar en bicicleta de montaña también aumentan el riesgo de caídas y por lo tanto el riesgo de una costilla. moretón. En el caso de un contusión de costilla, fuerte dolor en el lugar del impacto violento es típico, que también se desencadena o intensifica al tocar el área.

Toser y estornudar pueden aumentar la dolor. A veces el dolor puede irradiar a las áreas circundantes. El dolor también suele empeorar cuando se gira la parte superior del cuerpo.

Pequeño sangre vasos se ven afectados por el trauma. Además de un enrojecimiento de la piel, esto también está indicado por la posible formación de un moretón (hematoma). Inicialmente, sin embargo, casi nada es visible externamente, ya que la hinchazón o los hematomas solo se desarrollan más tarde.

A menudo, el dolor es tan severo y empeora con inhalación, por lo que los afectados a menudo solo respiran muy superficialmente. Para seguir bombeando suficiente aire a las vías respiratorias, respiración se vuelve más rápido. Esto puede provocar una sensación de falta de aire en el paciente. El dolor es particularmente intenso en los primeros tres días. A menudo es difícil encontrar el sueño.

Dolor en la espalda

Como resultado de la contusión de costilla, el dolor también puede ocurrir en la espalda, especialmente entre los omóplatos, así como en el área de la esternón. Estos son causados ​​por la tensión. Debido al dolor de la contusión costal, los pacientes adoptan una postura de alivio y así intentan "evitar" el dolor.

Sin embargo, este cambio de postura a su vez conduce a tensión muscular. Una visita a un fisioterapeuta suele ayudar aquí. Además, la aplicación de compresas térmicas promueve la relajación.