Síndrome metabólico: causas, tratamiento

Síndrome metabólico: descripción

El término "síndrome metabólico" resume varios factores que a menudo conducen a enfermedades cardiovasculares. Éstas incluyen:

  • sobrepeso severo (obesidad)
  • un equilibrio alterado de grasas y colesterol
  • presión arterial alta (hipertensión arterial)
  • un nivel anormalmente alto de glucosa en sangre debido a una acción insuficiente de la insulina

En Alemania, los expertos calculan que una de cada cuatro personas desarrollará el síndrome metabólico a lo largo de su vida. Se supone que esto duplica el riesgo de morir por las consecuencias de un infarto o un derrame cerebral. Además, un paciente con síndrome metabólico tiene aproximadamente cinco veces más probabilidades de desarrollar diabetes mellitus tipo 2 si no combate activamente estos factores de riesgo.

Síndrome metabólico: síntomas

Los síntomas del síndrome metabólico a menudo pasan desapercibidos durante mucho tiempo porque no causa dolor ni malestar en sí. El médico suele diagnosticarlo por casualidad durante un chequeo médico preventivo, o sólo después de un ataque cardíaco o un derrame cerebral.

Según el Instituto Robert Koch, el 67 por ciento de los hombres y el 53 por ciento de las mujeres en Alemania tienen sobrepeso. De ellos, el 23 por ciento de los hombres y el 24 por ciento de las mujeres tienen un sobrepeso grave (obesidad).

Los límites de la circunferencia abdominal varían algo según el origen étnico, pero todos están en el rango de un máximo de 102 centímetros para los hombres y 88 centímetros para las mujeres. Por encima de este valor, según la definición de la IDF, se habla de obesidad troncal, el signo más importante de un síndrome metabólico.

Sin embargo, para que se hable de síndrome metabólico se deben cumplir al menos otros dos de los siguientes factores:

  • colesterol "bueno" bajo (colesterol HDL)
  • presión arterial elevada. Puede provocar dolores de cabeza, mareos, hemorragias nasales o sensación de calor en la cabeza, pero también puede ocurrir sin síntomas. Y al igual que ocurre con el metabolismo lipídico alterado, este factor no desaparece de la evaluación del riesgo de síndrome metabólico, incluso si ya se ha iniciado el tratamiento para la hipertensión arterial.

Todos estos signos de la enfermedad son efectos del estilo de vida moderno, es decir, falta de ejercicio y mala alimentación (demasiados alimentos ricos en calorías).

Síndrome metabólico: causas y factores de riesgo.

Al mismo tiempo, en el síndrome metabólico se altera la excreción de sales, especialmente la sal común (cloruro de sodio), a través de los riñones. Cantidades elevadas de sodio en el cuerpo promueven la presión arterial alta. Esto no sólo daña los órganos, sino que también favorece pequeñas lesiones en la pared interna de los vasos sanguíneos. Se supone que esto favorece además el almacenamiento de grasa y colesterol. Con el paso de los años, el sistema cardiovascular se daña cada vez más.

Discusión de factores hereditarios.

Cada persona lleva información para todos los procesos metabólicos en su estructura genética. Esta información varía ligeramente de persona a persona, por lo que algunas personas tienen un mayor riesgo de desarrollar trastornos metabólicos. También se supone que los factores genéticos son responsables del síndrome metabólico. Sin embargo, el factor más importante sobre el que se puede influir sigue siendo el estilo de vida.

Síndrome metabólico: exámenes y diagnóstico.

Historial clínico

Para diagnosticar el síndrome metabólico, el médico pregunta al paciente sobre sus quejas actuales para obtener un historial médico (anamnesis). También pregunta si ha habido o hay antecedentes familiares de enfermedad cardiovascular. Los ataques cardíacos o accidentes cerebrovasculares en parientes cercanos pueden ser un indicio de una predisposición a sufrir trastornos metabólicos, que en última instancia pueden conducir al síndrome metabólico.

Investigaciones

Los análisis de sangre miden los niveles de glucosa y lípidos en sangre. La muestra de sangre necesaria para ello debe tomarse del paciente en ayunas. Sin embargo, también son relevantes otros valores sanguíneos: un nivel elevado de ácido úrico puede indicar síndrome metabólico. Los valores hepáticos muestran si el hígado graso se ha desarrollado debido a la obesidad o como resultado de una diabetes mal controlada.

Con la ayuda de electrocardiografía (ECG) y exámenes de ultrasonido (ecografía), el médico puede determinar si ya hay daños en el corazón u otros órganos. En caso de constricción grave de los vasos sanguíneos que irrigan el músculo cardíaco o después de un infarto, el ECG muestra cambios típicos. La ecografía, por otro lado, es una buena forma de detectar trastornos de las contracciones del músculo cardíaco.

Síndrome metabólico: tratamiento

Estudios estadounidenses y finlandeses han demostrado que incluso pequeños éxitos parciales pueden reducir el riesgo de secuelas graves o retrasar su aparición.

Medidas de terapia no farmacológica

Los métodos de tratamiento sin medicamentos consisten principalmente en un cambio en el estilo de vida: se recomienda más ejercicio y una dieta equilibrada baja en grasas.

El objetivo más importante es una reducción de peso moderada de entre un diez y un quince por ciento durante el primer año. Para lograrlo, los pacientes deben seguir una dieta especialmente baja en carbohidratos y grasas. También deberían reducir su consumo de sal para contrarrestar la presión arterial alta.

Los resultados de una nueva investigación muestran que, además del entrenamiento de resistencia, las cargas máximas cortas, como los sprints, pueden mejorar aún más el efecto. Pero incluso pequeños cambios en los hábitos de vida pueden marcar la diferencia: llegar al trabajo en bicicleta o a pie es el primer paso para muchos pacientes.

Tratamiento de drogas

  • Lípidos elevados en sangre: Los fibratos y las estatinas se encuentran entre los ingredientes activos más importantes para el tratamiento de los niveles elevados de lípidos en sangre. Las sustancias ayudan a reducir el colesterol LDL "malo" y a aumentar el colesterol HDL "bueno".
  • Aumento de la presión arterial: los inhibidores de la ECA y los bloqueadores de los receptores AT1 reducen la tensión de la pared de las arterias, por lo que el corazón tiene que superar menos resistencia al bombear la sangre.

Síndrome metabólico: curso de la enfermedad y pronóstico.

El síndrome metabólico es muy peligroso porque en realidad sólo causa síntomas cuando ya es demasiado tarde. La calcificación vascular (arterioesclerosis), los infartos o los accidentes cerebrovasculares son acontecimientos cuyas causas pasan desapercibidas a lo largo de los años. Por lo tanto, los síntomas reales de un estilo de vida poco saludable sólo aparecen muchos años después del comportamiento desencadenante.