Cual es el prognosis? | Síndrome facetario en la columna cervical.

¿Cuál es el pronóstico?

Una cervical síndrome facetario a menudo no es curable porque es causado por cambios degenerativos (relacionados con el desgaste) en el articulaciones de los pequeños cuerpos vertebrales. Sin embargo, con las opciones de terapia disponibles, un alivio duradero de la dolor hasta que se pueda lograr la ausencia de dolor y una mejora en la movilidad.

Resumen

In síndrome facetario de la columna cervical, dolor se siente generalmente en el cuello. A menudo se limita a esta área, pero también puede irradiarse al cabeza, hombros y omóplatos, o incluso en brazos y manos. Como regla, esto dolor depende de la postura.

Además, puede haber una movilidad limitada del cabeza en todas direcciones. En muchos casos, el dolor empeora durante el transcurso del día. La columna cervical no es tan susceptible a los signos de desgaste como la columna lumbar porque no tiene que soportar tanto peso y no tiene un rango de movimiento tan amplio.

Sin embargo, el movimiento aquí tampoco es tan limitado como en la región torácica, razón por la cual síndrome facetario es incluso más común aquí que en la columna torácica. El desencadenante del síndrome facetario suele ser una osteoartritis más o menos pronunciada, que puede provocar inflamación y / o inestabilidad de la columna debido a los segmentos vertebrales móviles. Por lo tanto, un médico debe examinar de cerca un síndrome facetario de la columna cervical.

Muchas estructuras vitales se encuentran aquí, especialmente vasos que suministran el cabeza y cerebro sangre, pero también algunos grandes los nervios. Por lo tanto, debe descartarse que existe el riesgo de que estos también puedan verse afectados como parte de reacciones inflamatorias o directamente dañados o irritados por segmentos vertebrales en movimiento libre, ya que esto podría conducir a complicaciones graves. El síndrome facetario generalmente se puede tratar con éxito sin cirugía, ya sea con medicamentos, remedios naturales, fisioterapia (por ejemplo ultrasonido o tratamientos térmicos), bloqueos de facetas, fisioterapia (con un enfoque en el desarrollo muscular a largo plazo y deportes favorables a la columna nadar o en bicicleta) o una combinación de estas diversas opciones. Además, factores de riesgo como exceso de peso y la tensión excesiva en la columna debe eliminarse en la medida de lo posible.