Pronóstico Tratamiento de fractura de tobillo bimaleolar

Pronóstico

Gracias a las modernas técnicas quirúrgicas y al calzado de apoyo, el pronóstico de esta articulación, que sin embargo está sometida a mucho estrés y tensión, es positivo en la mayoría de los casos. Sin embargo, esto siempre depende mucho de la cooperación del paciente. Si no se respetan las especificaciones de carga y los períodos de descanso, existe el riesgo de complicaciones y un retraso en la curación.

Igualmente importante es la cooperación activa en el tratamiento de seguimiento fisioterapéutico. La práctica regular, incluso independiente, es crucial para un resultado final estable. Sin embargo, las lesiones con afectación articular son bastante complicadas e, incluso con una buena cicatrización, pueden provocar problemas avanzados en la articulación a lo largo de la vida, que se comenta en el siguiente punto.

Efectos tardíos

A pesar de un proceso de curación positivo y una estabilidad recuperada por completo, los efectos tardíos en la articulación pueden ocurrir a lo largo de la vida. Con el paso de la edad, es bastante natural que el cuerpo se descomponga. Especialmente el articulaciones a menudo causan problemas a las personas mayores.

Articulaciones funcionan gracias al suave deslizamiento de dos extremos de hueso sobre una superficie lisa como un espejo. Después de una vida de estrés, articulaciones tienden a deteriorarse, la superficie lisa como la anguila se agrieta y conduce a una dolorosa restricción de movimiento. Una dolencia común de las personas mayores. Si la articulación ya se ha lesionado en vida, como en el caso de nuestro bimaleolar tobillo fractura, esta construcción perfecta ya está previamente dañada y, incluso si se cura bien más adelante, puede promover el desarrollo de artrosis.

La carga correcta

La carga en el pie después de un bimaleolar. tobillo fractura lo determina el médico tratante. Depende del método quirúrgico utilizado. Aquí nuevamente, se basa en el cicatrización de la herida fases descritas anteriormente, así como en el dolor.

En la primera y segunda fase, solo se permite una pequeña carga de hasta 10 kg para practicar movimientos ligeros de rodadura. Después de seis semanas, se han formado fibras que son lo suficientemente estables como para ajustarse a su carga futura. El dolor disminuye cada vez más y aumenta la capacidad de carga. Después de unos dos meses, el pie es idealmente capaz de soportar todo el peso de nuevo. Después de seis meses, la articulación debe estar lo suficientemente estable como para usarla como de costumbre y poder participar en deportes.