Alergia al moho: síntomas, desarrollo, tratamiento

Breve descripción

  • Síntomas: La alergia al moho puede causar muchos síntomas, que generalmente afectan el tracto respiratorio, la piel o el tracto digestivo.
  • Causas: La alergia al moho es causada por la sensibilización a diferentes componentes del hongo; El contacto intensivo (aumento de la exposición) favorece el desarrollo de una alergia.
  • Prevención: Para minimizar el contacto con el moho, proporcione una buena circulación de aire en el interior; Evite alimentos con restos de moho, jardinería, hojas y abono.
  • Tratamiento: El médico suele tratar la alergia aguda al moho con fármacos antialérgicos; la hiposensibilización es posible para el tratamiento a largo plazo.
  • Diagnóstico: El médico determina una alergia al moho analizando los síntomas y confirmándola con una prueba cutánea, de sangre o de provocación.
  • Cuándo consultar a un médico: Siempre se debe consultar a un médico si se sospecha una alergia al moho y de inmediato si los síntomas son graves.

¿Cuáles son los síntomas de una alergia al moho?

Los síntomas de la alergia al moho son variados. Esto se debe, por un lado, a que existen alrededor de un millón de tipos diferentes de moho y, por otro lado, las reacciones son muy diferentes. Las reacciones alérgicas o el envenenamiento (reacción tóxica) son provocadas por diferentes partes del hongo. Algunas personas reaccionan sólo a las esporas del hongo, otras también a los hilos del hongo (micelio).

Los síntomas más comunes de la alergia al moho son:

  • Irritación de las mucosas (MMI, Mucous Membrane Irritation).
  • Tos, rinitis, estornudos, congestión nasal.
  • Sinusitis crónica
  • Asma bronquial alérgica
  • Conjuntivitis alérgica (rinoconjuntivitis)
  • Ojos rojos, llorosos y con picazón
  • Neurodermatitis (eccema atópico)
  • Urticaria (urticaria)

A grandes rasgos se distingue entre los síntomas provocados por el contacto externo (p. ej. a través de las mucosas y las vías respiratorias) con partes del moho y los que entran al cuerpo a través de los alimentos. En caso de contacto a través de las mucosas del tracto respiratorio, las consecuencias son ojos llorosos, secreción nasal e inflamación de las vías respiratorias. Cuando los hongos ingresan al cuerpo a través de los alimentos, a menudo desencadenan síntomas en el tracto gastrointestinal (náuseas, malestar general, diarrea) o reacciones cutáneas como la urticaria.

En el caso de una alergia al moho, son posibles reacciones inmediatas (alergia de tipo 1), pero también enfermedades graves y tardías (alergia de tipo 3 y 4, alergia de tipo tardío). Obtenga más información sobre los diferentes tipos de alergias aquí.

¿Puede una alergia al moho provocar una reacción cruzada?

Una alergia cruzada al moho suele estar dirigida a otras formas de moho. Esto significa que, si hay alergia al moho a un determinado tipo de hongo, los afectados normalmente también reaccionan a tipos similares de moho. Por lo tanto, a menudo no es posible identificar claramente cuál es la alergia original y cuál es una reacción cruzada. Esto influye, por ejemplo, en la inmunoterapia especializada (hiposensibilización), para la cual el médico debe conocer la causa inicial de la alergia.

Algunos grupos de antibióticos, como la penicilina o la ampicilina y la amoxicilina, se desarrollaron bioquímicamente en mohos y pueden causar reacciones alérgicas en pacientes alérgicos al moho. ¡Asegúrese de informar a su médico sobre su alergia antes de tomar estos medicamentos!

¿Cómo se desarrolla una alergia al moho?

Tras un contacto repetido con la sustancia clasificada como peligrosa, se activa la defensa repentina, provocando una reacción alérgica. El aspecto detallado de las reacciones depende del tipo de alergia.

En la forma inmediata, el sistema inmunológico forma anticuerpos específicos (inmunoglobulinas, IgE) contra el moho, que se activan al entrar en contacto con él y provocan síntomas en pocos minutos. En cambio, en la alergia tipo 4 las células inmunitarias desempeñan un papel importante. Las células de defensa (células T) son activadas por el moho y a menudo provocan reacciones especialmente fuertes.

Un sistema inmunológico debilitado, un resfriado difícil de tratar (rinitis) o una sinusitis favorecen el desarrollo de una alergia. El asma difícil de tratar, la hipersensibilidad hereditaria (predisposición atópica) y los antecedentes de alergias también aumentan el riesgo de alergia al moho.

  • Gestión de residuos (eliminación de residuos, separación, incineración, clasificación de materiales reciclables y compostaje)
  • Agricultura (heno, ganadería)
  • Producción de piensos
  • Procesamiento de plantas (horticultura, carpintería y floricultura)
  • Viticultura y cervecería
  • Procesamiento de harina (molinero, panadero, pastelero)
  • Ventilación y aire acondicionado

¿Qué no se debe comer si se es alérgico al moho?

Para evitar reacciones alérgicas, es importante que los pacientes no coman alimentos afectados por el moho. El moho visible indica que los alimentos están en mal estado y ya no son comestibles. Incluso si no hay alergia al moho, es perjudicial para la salud. Los alimentos particularmente susceptibles a la infestación de moho son:

  • Bebidas fermentadas (cerveza, vino, kéfir)
  • Jugos de fruta
  • Queso moldeado (queso azul como Brie, Camembert, Roquefort) y salami
  • Pan (especialmente pan de centeno)
  • Cereales

¿Cómo se trata la alergia al moho?

Para poder tratar una alergia al moho, primero es necesario encontrar su origen. Además de los exámenes médicos, conviene echar un vistazo al domicilio y al lugar de trabajo del alérgico. Porque también la evitación del moho es una medida importante de la terapia. Para una mejora permanente de las dolencias, en algunos casos es útil o necesario un cambio de situación residencial o laboral (mudanza, renovación del espacio habitable, cambio de trabajo).

Para el tratamiento de la alergia al moho, el médico suele recetar medicamentos antialérgicos para el alivio agudo de los síntomas. Están disponibles en forma de tabletas, aerosoles o gotas. Los principios activos contra los hongos (antimicóticos) en forma de pomada o comprimidos suelen formar parte del tratamiento. La hiposensibilización también es posible en el tratamiento a largo plazo de una alergia al moho tipo 1.

Para la hiposensibilización es necesario identificar y producir artificialmente el alérgeno que desencadena la alergia. Actualmente, la hiposensibilización es posible para entre 30 y 40 alérgenos de moho. El ingrediente activo de la terapia se puede inyectar debajo de la piel (SCIT, inmunoterapia subcutánea) o tomarse debajo de la lengua mediante tabletas o gotas (SLIT).

¿Cómo se pueden evitar los mohos?

Hay algunas formas de evitar el moho en su hogar. El moho, como todos los tipos de hongos, se propaga mejor en un clima húmedo y cálido. Por lo tanto, es importante mantener la humedad en los espacios habitables lo más baja posible. Las áreas particularmente en riesgo de infestación de moho son:

  • madera (por ejemplo, las paredes traseras de los armarios)
  • Papel pintado
  • Cartón (cartón)
  • Alfombras

¿Qué puedes hacer para prevenir el moho en el apartamento?

  • ¡Ventile regularmente! Lo ideal es ventilar al menos tres veces al día durante cinco a 15 minutos.
  • Los baños y las cocinas suelen acumular mucha humedad debido a la ducha y la cocina. ¡Asegure una circulación de aire suficiente!
  • Mantenga la cabina de ducha y la bañera secas después de su uso.
  • ¡Proporcione suficiente calefacción! Esto evita que el aire frío y húmedo se condense en las ventanas o se deposite en otras superficies de la casa.
  • No coloque muebles directamente contra las paredes exteriores para permitir la circulación del aire.
  • Evite los humidificadores o acondicionadores de aire por completo, si es posible, o realice un mantenimiento regular.
  • Las plantas de interior también aumentan la humedad y exacerban los síntomas de las alergias. Se recomienda evitarlos, especialmente en el dormitorio.
  • Vacíe todos los botes de basura con regularidad.
  • Saque el polvo con frecuencia (especialmente durante la temporada de polen).
  • Los estudios demuestran que al renovar el apartamento se frena la humedad y, por tanto, la propagación del moho. Esto tiene un efecto positivo en diversas alergias que afectan al tracto respiratorio y al asma.

Los mohos siempre son perjudiciales para la salud. Independientemente de si todavía están creciendo activamente o ya se han secado.

¿Qué deben tener en cuenta las personas alérgicas al moho en el exterior?

Evitar el contacto con el moho al aire libre es difícil. Sin embargo, estos consejos son útiles para mantener al mínimo la exposición de las personas alérgicas.

  • Evite trabajar en el jardín y estar cerca de abono, hojas mojadas o recortes de césped.
  • El calendario también influye en las alergias al moho: evite pasar mucho tiempo al aire libre en climas húmedos a finales del verano y en el otoño.
  • Evite los paseos por el bosque después de un tiempo lluvioso.

¿Cómo se propaga el moho?

Algunos tipos de moho se encuentran principalmente en interiores, mientras que otros se encuentran principalmente en exteriores. Los expertos médicos sospechan que la mayor parte de todas las alergias al moho son provocadas por especies de hongos que se encuentran al aire libre.

Desde finales del verano hasta principios del otoño, los niveles más altos de moho se miden en el aire fresco. Esto se debe a la alternancia de calor y lluvia o alta humedad durante esta época del año.

¿Cómo se reconoce una alergia al moho?

Debido a los muchos síntomas posibles de una alergia al moho, a menudo al médico tratante le resulta difícil diagnosticarla con claridad. Durante la consulta (anamnesis), el médico intenta averiguar más sobre la causa de la alergia al moho y excluir otros desencadenantes de los síntomas. Al hacerlo, hace algunas preguntas, por ejemplo:

  • ¿Cuándo empezaron los síntomas?
  • ¿Los síntomas cambian en diferentes lugares?
  • ¿Los síntomas ocurren todo el año o dependen de la estación?
  • ¿Tiene mascotas y, de ser así, los síntomas empeoran después del contacto con ellas?

Durante el examen físico, el médico se centra en las mucosas del tracto respiratorio, los ojos y la piel de la persona afectada.

Diferentes pruebas ayudan al médico a reconocer una alergia al moho y a diferenciarla de otras alergias. Para distinguir si se trata de una alergia al moho o de una alergia a los ácaros del polvo, a las gramíneas y al polen de hierbas, el médico suele recurrir a pruebas cutáneas, de sangre o de provocación para el diagnóstico.

Si los síntomas empeoran con la lluvia y los vientos fuertes, esto suele ser una indicación de que se trata de una alergia al moho y no al polen.

Prueba de la piel

Los síntomas suelen alcanzar su punto máximo después de 15 a 20 minutos y suelen desaparecer nuevamente después de dos horas. Esto es lo que los médicos llaman reacción de tipo inmediato. Esto también puede ocurrir con un ligero retraso. Una reacción de tipo tardío es cuando los síntomas aparecen horas o días después de la prueba.

Hasta el momento existen soluciones para entre 30 y 40 tipos diferentes de moho para una prueba de alergia en la piel. Si la alergia existe a otro tipo de hongo, no se puede detectar mediante una prueba cutánea.

La ingesta de medicamentos (antihistamínicos o agentes que contengan cortisona) puede alterar el resultado.

Los análisis de sangre.

Pruebas de provocación

Las pruebas de provocación se utilizan cuando los análisis de sangre y cutáneos no han arrojado resultados claros. Estas pruebas se realizan en los ojos, los bronquios o la nariz. El médico expone específicamente la zona del cuerpo seleccionada a una solución de moho y observa la reacción. En este tipo de pruebas, es necesario que la persona afectada permanezca bajo atención médica durante al menos media hora después de la prueba para controlar también posibles reacciones retardadas.

Las pruebas de provocación no se realizan si:

  • La nariz está muy inflamada.
  • Actualmente hay síntomas graves.
  • Están presentes enfermedades alérgicas agudas de otros órganos.
  • El paciente tiene menos de cinco años, ya que pueden provocar fuertes ataques de alergia, en el peor de los casos potencialmente mortales.
  • Se están tomando ciertos medicamentos (betabloqueantes, inhibidores de la ECA)
  • La persona ha tenido reacciones alérgicas graves en el pasado (shock anafiláctico).

¿Qué es una alergia al moho?

En el caso de una alergia al moho, los afectados reaccionan con diferentes síntomas al contacto con componentes (esporas o filamentos de hongos) del moho. Como ocurre con cualquier alergia, esto resulta en una reacción exagerada del sistema inmunológico a una sustancia que es inofensiva en sí misma. Los síntomas son muy variados, pero es especialmente frecuente la irritación de las mucosas y de los ojos.

Si el moho se ingiere a través de los alimentos, en muchos casos se producen náuseas, vómitos, diarrea o reacciones cutáneas como la urticaria.

¿Cuándo debo consultar a un médico si tengo alergia al moho?

Siempre consulte a un médico si presenta síntomas que indiquen alergia al moho. Si solo tiene síntomas leves, el médico puede recomendar observar el desarrollo de los síntomas durante un período de tiempo para llegar a un diagnóstico.