Terapia Sudando en la cabeza

Terapia

Sobre todo, debe consultar a un médico si de repente experimenta un aumento de la transpiración en su cabeza. Esto a menudo es causado por una enfermedad previa que necesita tratamiento. Con el tratamiento de la enfermedad, la sudoración en el cabeza generalmente desaparece.

Si, por ejemplo, la tiroides está hiperactiva (hipertiroidismo), se administran medicamentos para bloquear la producción de hormona tiroidea y así reducir la producción excesiva de sudor. Si el aumento de la sudoración durante la menopausia es causado por los cambios hormonales naturales, se pueden utilizar remedios a base de hierbas. Estos incluyen, por ejemplo, vela de plata de uva, en forma de comprimidos, o trébol rojo, soja (por ejemplo, yogur de soja), manto de dama o salvia.

Estos pueden ayudar a reducir la sudoración en el cabeza y el cuerpo, así como sofocos durante la menopausia. Los baños menopáusicos también pueden ser adecuados para inhibir la sudoración. Las terapias de reemplazo hormonal se pueden discutir con un médico.

Sin embargo, efectos secundarios como cáncer de mama, las enfermedades cardiovasculares o trombosis también deben ser consideradas y discutidas. Además, abstenerse de alcohol, tabaco, té o café puede ayudar a reducir la sudoración. Ser exceso de peso puede causar hiperhidrosis.

Por tanto, la pérdida de peso puede ayudar a reducir sudando en la cabeza. Si la causa de sudando en la cabeza es la hiperhidrosis primaria, la cara, el cuero cabelludo y cuello Puede tratarse con antitranspirantes que contengan cloruro de aluminio (20%). Se debe tener cuidado para evitar que el producto entre en contacto con los ojos o ingestión.

Al tratar la cara, se debe tener cuidado de aplicar un cuidado adicional o comprar antitranspirantes que contengan dichos productos para el cuidado. Al aplicar el producto, debe aplicarse rayando rayando en el cuero cabelludo para asegurar una buena distribución. Además, es posible una operación llamada bloqueo endoscópico del nervio simpático torácico (ETS).

Esto implica bloquear o cortar el nervio simpático responsable de la sudoración en la cara. Las posibilidades de éxito son del 90%. Desde anestesia general se requiere, esta operación conlleva riesgos típicos y debe ser discutida con el médico. Un tratamiento de Botox en la cara también puede ayudar a reducir la sudoración. Sin embargo, este tratamiento solo debe ser realizado por un médico experimentado, ya que puede conducir rápidamente a una parálisis muscular indeseable.