Micosis fungoide

Micosis fungoide (MF) (sinónimos: célula T cutánea linfoma (CLCL); linfoma cutáneo; De células T noLinfoma de Hodgkin; Síndrome de Alibert-Bazin; linfoma proliferativo; ICD-10-GM C84.0: micosis fungoide) es una célula T crónica linfoma (subgrupo de linfomas no Hodgkin) que se manifiesta principalmente en el piel (linfoma cutáneo).

La micosis fungoide pertenece a los linfomas cutáneos primarios y al grupo de linfomas cutáneos de células T. Aproximadamente el 70% de los linfomas cutáneos de células T existen como linfomas cutáneos primarios.

La célula inicial de una célula T linfoma es una célula T que se ha degenerado, continúa multiplicándose y afecta la piel. En consecuencia, es una enfermedad tumoral de la T linfocitos. Las células T son parte del sistema inmunológico.

La enfermedad se presenta periféricamente (lejos del tronco del cuerpo) y tiene un grado de malignidad bajo (malignidad baja). eczema formación, inicialmente se pensó que la enfermedad era una enfermedad fúngica (micosis), lo que llevó a este nombre engañoso.

Proporción de sexos: datos contradictorios sobre el sexo existen en la literatura.

Pico de frecuencia: la enfermedad se presenta predominantemente en la segunda mitad de la vida, entre los 40 y los 70 años (edad media de aparición 55-60 años).

La micosis fungoide, aunque es el linfoma cutáneo maligno más común (2%), es en sí misma una enfermedad muy rara. La incidencia (frecuencia de nuevos casos) es de 0.3 a 0.5 casos por 100,000 habitantes por año.

Evolución y pronóstico: La micosis fungoide progresa por etapas. En la primera etapa, la enfermedad se desarrolla muy lentamente e inicialmente se presenta como un exantema pruriginoso crónico (erupción). Comienza focalmente (focal). Aún es posible una cura en la primera etapa. A medida que avanza la enfermedad, el grado de piel aumenta la participación. Los nuevos focos aparecen repetidamente, mientras que los antiguos progresan en su expresión y severidad (imagen polimórfica). En la etapa avanzada (etapa tumoral), la enfermedad progresa rápidamente y afecta a los linfa nodos así como órganos internos (bazo, hígado, pulmones, SNC). Entonces, el pronóstico es malo. Sin embargo, las medidas terapéuticas aún pueden lograr remisiones más duraderas (disminución permanente de los síntomas de la enfermedad, pero sin lograr la recuperación) incluso entonces.

La esperanza de vida media después del diagnóstico es de 7 a 10 años. El factor pronóstico es el estadio en el momento del diagnóstico.