Inflamación de los sacos lagrimales durante el embarazo | Inflamación de los sacos lagrimales (dacrocistitis)

Inflamación de los sacos lagrimales durante el embarazo.

If inflamación del saco lagrimal ocurre durante el embarazo, primero se debe intentar evitar o contener la progresión con simples remedios caseros o remedios homeopáticos. Los masajes ligeros del saco lagrimal pueden ayudar a eliminar la causa de la inflamación. Las almohadillas de pepino, las toallitas o las bolsas de té frías y escurridas pueden aliviar la hinchazón del saco lagrimal. Manzanilla es particularmente curativo en cualquier forma: los paños empapados en té de manzanilla frío o en bolsitas de té frío ayudan a aliviar la hinchazón y tienen un efecto antibacteriano.

Sin embargo, se debe consultar a un médico a tiempo si se hace evidente que la inflamación del saco lagrimal no se puede contener con remedios caseros. El médico ajustará la terapia antibiótica a las circunstancias del el embarazo. En general, para proteger al bebé, la mujer embarazada debe verificar con cada terapia con medicamentos si la toma de medicamentos es inofensiva para el niño o si debe consultar a un médico.

Inflamación de los sacos lagrimales del bebé.

Si la inflamación de los sacos lagrimales ocurre en la infancia (entonces llamada dacrocistitis neonatal), la causa es congénita. Es una constricción en forma de pliegue en la membrana mucosa, que normalmente se abre durante el desarrollo. Este pliegue se encuentra en el área del llamado Ductus nasolacrimalis, una conexión natural entre el rabillo del ojo y el nariz.

Aquí es donde entra en juego la fluido lagrimal se escurre en personas sanas. Si no se abre, hay una constricción que dificulta el drenaje de fluido lagrimal. Esto provoca una congestión de fluido lagrimal.

Esto proporciona la base óptima para el crecimiento de bacterias fotosintéticas que provocan la inflamación del saco lagrimal. Los síntomas suelen aparecer en las primeras semanas después del nacimiento. La aparición de la inflamación del saco lagrimal en la infancia suele consistir en una protuberancia de pus desde la esquina interior del ojo.

Esto luego se acumula en el párpado. Si el médico diagnostica una inflamación del saco o de las bolsas lagrimales, la terapia suele consistir primero en introducir gotas de antibiótico y descongestionantes en los ojos y nariz. A menudo, la constricción desaparecerá mientras espera.

Además, se puede aplicar una ligera presión repetidamente al saco lagrimal desde el exterior, lo que a menudo hace que se abra la constricción. Si estas medidas no tienen éxito, un breve procedimiento bajo anestesia puede ser necesario para permitir que el líquido lagrimal drene libremente. Esto generalmente resuelve el problema.