Fimosis

Introducción

La fimosis (sinónimo: rigidez del prepucio) es causada por una desproporción entre el ancho del prepucio y el tamaño del glande del pene (glande del pene). Debido a esta estrechez, el prepucio no puede retraerse detrás del glande del pene a partir de los 2 años aproximadamente. Esto puede provocar inflamación, dolor y complicaciones al orinar. Además, un prepucio demasiado apretado puede conducir a la situación de emergencia de parafimosis. En este caso, el prepucio ya no se puede tirar hacia adelante y, por lo tanto, evita la sangre suministro al glande.

Etiología

La prevalencia es del 5-7% para los niños de entre 5 y 7 años. A la edad de 16 años, aproximadamente el 1% de los niños todavía se ven afectados.

Síntomas

Los síntomas de la fimosis pueden incluir dolor al orinar o hinchazón del prepucio (balangitida) al orinar. La orina no se puede vaciar por completo, sino que fluye detrás del prepucio y lo hincha. Además, la higiene genital no se puede llevar a cabo lo suficientemente a fondo, lo que puede conducir a inflamación del glande o prepucio. Estos van acompañados de dolor, hinchazón del glande y enrojecimiento y suelen ser muy molestos para la persona afectada. No es raro que el glande se vuelva azulado durante una erección.

Diagnóstico

La fimosis suele ser notada en casa por la madre o por el propio niño, según el grado de rigidez del prepucio y los síntomas. Por lo tanto, no es necesario ningún equipo de diagnóstico para diagnosticar la fimosis con certeza. Los hallazgos táctiles y visuales en combinación con los síntomas descritos suelen ser suficientes.

La única terapia curativa es la circuncisión quirúrgica (circuncisión). Bajo ninguna circunstancia se debe realizar la retracción manual. Esto no solo puede tener consecuencias traumáticas para el niño, sino que también es doloroso y puede provocar lesiones en el prepucio.

Estos a su vez pueden dejar cicatrices y, por lo tanto, provocar una fimosis cicatricial. Por lo tanto, todas las constricciones del prepucio se corrigen quirúrgicamente. El prepucio se puede eliminar solo parcial o radicalmente, según lo deseen los padres.

La circuncisión es hoy en día un procedimiento de rutina y se puede realizar de forma ambulatoria si el procedimiento transcurre sin complicaciones. La operación se suele realizar entre el 2º año de vida y el ingreso a la escuela, siempre que no haya problemas, dolores o complicaciones. Si este es el caso, la operación debe realizarse lo antes posible, independientemente de la edad. Las contraindicaciones para la cirugía son infecciones u otras anomalías genitales. Especialmente hipospadias (formación de hendidura anterior del uretra) es una contraindicación, ya que para esta corrección quirúrgica se utiliza preferentemente el prepucio para cerrar completamente la uretra.