Factores de riesgo | Síndrome metabólico

Los factores de riesgo

La síndrome metabólico, también conocido como síndrome de afluencia, describe una combinación de varios factores de riesgo, que incluyen obesidad (obesidad), un trastorno lipometabólico, hipertensión y diabetes mellitus tipo 2. Además de un contenido calórico particularmente alto dieta, una falta pronunciada de ejercicio juega un papel decisivo en el desarrollo de este condición y también es el principal punto de ataque en terapia. Obesidad puede objetivarse mediante varios parámetros de medición, como la circunferencia de la cintura o índice de masa corporal (IMC)

La circunferencia de la cintura para los hombres es de más de 94 cm en el caso de los relacionados con el tronco. obesidad y más de 80 cm para las mujeres. La índice de masa corporal se calcula dividiendo el peso en kilogramos por la altura en metros al cuadrado (kg / m2). La adiposidad se define a partir de un valor de 30.

A metabolismo de la grasa El trastorno puede ser determinado genéticamente, por un lado, por otro lado, generalmente se adquiere en el contexto de una síndrome metabólico. Valores de laboratorio como triglicéridos o HDL ayudar a determinar esto. Estos se elevan en un nivel continuamente alto en grasas. dieta y puede conducir a la calcificación de la sangre vasos.

Esto a su vez promueve hipertensión, como la sangre vasos pierden su elasticidad y la corazón tiene que aplicar más fuerza y ​​presión para suministrar sangre al cuerpo. Los valores que prueban esto son sangre presiones sistólicas por encima de 150 mmHg, diastólicas por encima de 90 mmHg. Control de Diabetes mellitus tipo 2 es promovido por un dieta eso es demasiado alto en calorías y azúcar, pero las causas genéticas también juegan un papel importante. Los hijos de un diabético tipo 2 tienen un 50 por ciento de probabilidad de desarrollar diabetes en su vida.

Tratamiento

El objetivo del tratamiento de un síndrome metabólico es prevenir incidentes graves como un golpe or corazón ataque. La primera prioridad es un cambio de estilo de vida. Mucho ejercicio y una dieta sana, equilibrada y baja en grasas son los requisitos previos más importantes.

Para lograrlo, existen cursos de formación especiales en los que los pacientes pueden participar. Aquí aprenden a comer bien. Entre otras cosas, estos incluyen cómo cocinar platos que les ayuden a perder peso y reducir la ingesta de sal.

Ambos conducen a una reducción de hipertensión. En estos cursos también se ofrece terapia de ejercicio. Lo más importante es regular resistencia, entrenamiento para quemar grasa y desarrollar músculos que queman energía. Si un trastorno metabólico, por ejemplo diabetes, o enfermedades del sistema cardiovascular se conocen de antemano, por lo general se requiere medicación además de cambios en el estilo de vida. Por un lado, diabetes mellitus or insulina la resistencia se puede tratar con medicación, pero alta sangre La presión arterial y los niveles elevados de lípidos en sangre también pueden reducirse con ciertos medicamentos.