Sacro: estructura y función

¿Qué es el sacro?

El sacro (Os sacrum) es el penúltimo segmento de la columna. Consiste en las cinco vértebras sacras fusionadas y los restos de sus costillas, que juntas forman un hueso grande, fuerte y rígido. Tiene forma de cuña: es ancha y gruesa en la parte superior y se vuelve estrecha y delgada hacia la parte inferior. El sacro está curvado hacia atrás (cifosis sacra).

Superficie anterior del sacro

Superficie dorsal del sacro

El lado convexo, rugoso y curvado hacia afuera del os sacro mira hacia atrás. Tiene cinco crestas longitudinales: la del medio es irregular y representa los restos de las apófisis espinosas de las vértebras sacras. Paralelamente, a la derecha y a la izquierda discurre una ingle, que se formó mediante la fusión de las apófisis articulares.

La punta inferior de la cuña sacra está conectada al cóccix, adyacente por debajo, mediante un disco intervertebral.

Articulación sacroilíaca y anillo pélvico.

El os sacro se articula a los lados derecho e izquierdo del respectivo ilion. Estas dos articulaciones se denominan articulaciones sacroilíacas (ISG, articulaciones sacroilíacas). Están estabilizados por ligamentos tensos y, por tanto, tienen poco movimiento. Activamente, el ISG no se puede mover en absoluto.

¿Cuál es la función del sacro?

El sacro conecta la columna con los huesos de la cadera, transfiriendo la carga del torso a los muslos.

¿Dónde está el sacro?

El sacro se encuentra en la zona pélvica, entre la columna lumbar y el coxis.

¿Qué problemas puede causar el sacro?

En un sacro acutum (S. arcuatum), el sacro está doblado en su tercio inferior casi perpendicular a la columna lumbar.

Las llamadas espondiloartropatías (espondiloartropatías) son enfermedades reumáticas crónicas que se asocian principalmente con inflamación de la columna y de las articulaciones sacroilíacas. Incluyen, por ejemplo, la enfermedad de Bekhterev (espondilitis anquilosante).