Agnosia: causas, síntomas, formas, tratamiento.

Descripción breve

  • ¿Qué es la agnosia? En la agnosia, la persona afectada ya no puede reconocer los estímulos sensoriales, aunque la percepción se conserva, el órgano sensorial está intacto y la atención y las capacidades intelectuales no se ven afectadas.
  • Causas: daño a ciertos lóbulos del cerebro, por ejemplo, debido a un accidente cerebrovascular, un tumor cerebral, un absceso cerebral o enfermedades en las que muere tejido cerebral sucesivo (como en la enfermedad de Alzheimer).
  • Síntomas: Dependiendo del tipo de agnosia, por ejemplo, incapacidad para identificar lo que se ve (agnosia visual) o para reconocer sonidos (agnosia auditiva).

Agnosia: definición

En la agnosia, la persona afectada ya no puede reconocer los estímulos sensoriales, aunque se conserva la percepción misma. De este modo, los órganos de los sentidos funcionan correctamente y tampoco se produce ningún deterioro mental (como la demencia). En cambio, la agnosia se basa en una alteración en el procesamiento de la información, por ejemplo como resultado de un derrame cerebral. Es relativamente raro.

Formas de agnosia

  • Agnosia visual con formas especiales como prosopagnosia, agnosia cromática.
  • agnosia táctil
  • agnosia espacial
  • agnosia olfativa
  • agnosia auditiva
  • autotopagnosia
  • Anosognosia

Agnosia: causas y posibles enfermedades.

La agnosia resulta del daño a lóbulos específicos del cerebro: lóbulos occipital, parietal o temporal, todos ellos parte del cerebro. Por ejemplo, la agnosia visual es causada por un daño en el lóbulo occipital, la parte más trasera del cerebro cuyas tareas incluyen el procesamiento de la información visual. La agnosia acústica, por el contrario, se debe a una lesión en la zona de los lóbulos temporales posteriores (lóbulo temporal), indispensable para la audición. La autotopagnosia resulta de una lesión del lóbulo parietal.

Las posibles causas de daño cerebral incluyen:

  • Lesión craneal
  • Recorrido
  • Tumor cerebral
  • absceso cerebral
  • Enfermedades con deterioro progresivo del tejido cerebral (como la enfermedad de Alzheimer)

Agnosia: síntomas

Agnosias visuales

En el caso de la agnosia visual u óptica (también llamada ceguera del alma), la persona afectada no puede vincular las percepciones ópticas con los recuerdos ópticos. Esto significa que el paciente puede ver un objeto (objeto, cara, etc.) pero no puede reconocerlo. Sin embargo, si puede oír el objeto o atacarlo, por ejemplo, es posible que lo reconozca.

La agnosia visual se divide en diferentes subtipos como:

  • Prosopagnosia (ceguera facial): las personas afectadas no pueden reconocer ni distinguir rostros familiares (de familiares, amigos, etc.). En cambio, tienen que confiar en otras características (voz, ropa, gestos, etc.) para identificar a los individuos.
  • Agnosia asociativa: aquí la persona afectada reconoce la forma de un objeto (como un martillo), pero desconoce su significado. Es decir, no sabe para qué sirve el martillo.
  • Agnosia cromática: las personas afectadas pueden percibir colores, pero no pueden reconocerlos ni nombrarlos. Esta forma de agnosia no debe confundirse con el daltonismo, una condición en la que las personas afectadas no pueden percibir colores individuales o todos.

Agnosia táctil

La agnosia táctil también se llama estereoagnosia, astereognosia o ceguera táctil. Se entiende como la incapacidad de identificar algo únicamente mediante la palpación o el tacto (sin control visual), aunque el sentido del tacto funciona con normalidad. Por tanto, la persona afectada no puede reconocer ni nombrar objetos y materiales sólo con tocarlos y palparlos.

agnosia espacial

En esta forma de trastorno del reconocimiento, la persona afectada no puede orientarse en el espacio ni en su propio cuerpo.

Agnosia olfativa

Agnosia auditiva

La agnosia auditiva también se llama sordera del alma. Se caracteriza por el hecho de que la persona afectada, a pesar de tener una audición intacta, no puede identificar sonidos o tonos ni reconocerlos en su contexto. Por ejemplo, si suena un teléfono en la habitación de al lado, lo oye pero no puede reconocerlo como un timbre de teléfono. O puede oír tonos individuales pero no puede reconocerlos en su contexto como melodías.

autotopagnosia

En la autotopagnosia, el afectado no puede localizar ni nombrar las partes de su propio cuerpo y no puede localizar correctamente los estímulos cutáneos de su propio cuerpo, aunque la sensibilidad superficial está intacta.

Anosognosia

Agnosia: ¿Cuándo deberías acudir al médico?

Si la agnosia vuelve a aparecer, es una señal de advertencia de una función cerebral alterada. Si la causa es un derrame cerebral, ¡es una emergencia que debe ser tratada por un médico de inmediato!

Agnosia: ¿Qué hace el médico?

Para diagnosticar la agnosia, el médico realizará diversas pruebas y exámenes dependiendo del área sensorial afectada. Por ejemplo, si se sospecha agnosia visual, le pedirá al paciente que nombre varios objetos (como un bolígrafo, un libro, etc.) o le demuestre su uso. Para detectar la prosopagnosia, se presentan al paciente fotografías de familiares o personalidades conocidas para que las nombre.

Antes de estas pruebas, el médico debe asegurarse de que el paciente haya comprendido sus instrucciones y de que no se produzca afasia adicional (trastorno del habla), como suele ocurrir, por ejemplo, en la autotopagnosia. Si el paciente tiene dificultades para expresarse y comprender lo que alguien dice, esto puede falsear el resultado de la prueba.

Si la agnosia realmente está presente, se debe aclarar su causa. Las imágenes del cerebro, por ejemplo mediante tomografía computarizada (CT) o resonancia magnética (MRI), pueden ser de ayuda. De esta manera, por ejemplo, se pueden identificar procesos que ocupan espacio, como un tumor o una hemorragia cerebral, como la causa del daño cerebral y, por tanto, de la agnosia.

Tratamiento de la agnosia

Por otro lado, el tratamiento de la agnosia tiene como objetivo facilitar al máximo a los pacientes vivir la vida cotidiana con su discapacidad. Los terapeutas ocupacionales y logopedas, por ejemplo, pueden mostrar a los afectados formas de compensar sus déficits. Por ejemplo, un paciente con prosopagnosia (ceguera facial) se entrena para reconocer a las personas por rasgos distintos de su rostro, como el color y el peinado del cabello, la voz o la forma de andar.

Agnosia: lo que puedes hacer tú mismo

En cualquier caso, los familiares pueden ser un gran apoyo. Lo mejor es hablar con el médico o terapeuta tratante sobre cómo pueden apoyar eficazmente al paciente agnósico.