¿Cuándo no se debe utilizar la iontoforesis? | Iontoforesis

¿Cuándo no se debe utilizar la iontoforesis?

Las contraindicaciones no son muy numerosas pero sí significativas. En ningún caso los pacientes con marcapasos con iontoforesis ser tratado por el flujo de corriente. No por la medicación, sino por el flujo de corriente.

Esto puede perturbar gravemente la "corriente equilibrar"De un marcapasos y su función puede verse afectada. Desde el corazón es "impulsado" por los propios impulsos eléctricos del cuerpo, los pacientes con arritmias cardíacas no deben recibir tratamiento, ya que pueden agravarlas y provocar complicaciones potencialmente mortales. Además, iontoforesis no debe usarse en heridas abiertas o inflamadas o lesiones cutáneas.

Los defectos más pequeños se pueden cubrir con Vaselina y por lo tanto están protegidos de la corriente y las personas afectadas aún pueden recibir tratamiento. Las mujeres embarazadas tampoco deben exponerse a la corriente. Los efectos de la corriente sobre el niño serían impredecibles y no existen estudios que demuestren su inocuidad.

Incluso en pacientes con partes metálicas en el cuerpo, se deben sopesar cuidadosamente los pros y los contras. Los piercings se pueden quitar fácilmente, los problemas son las prótesis articulares en las rodillas o las caderas o también los tornillos, clavos o placas que se insertaron en partes del cuerpo rotas. también la espiral para anticoncepción está hecho en parte de metal y no debe estar en el área de tratamiento. Pacientes con perturbado dolor También se desaconseja la terapia, ya que las lesiones como las quemaduras pueden notarse demasiado tarde o no notarse en absoluto.

¿Cuáles son los efectos secundarios?

En general, la electricidad no es dañina para el organismo. En algunos casos, pueden ocurrir descargas eléctricas leves (especialmente cuando las partes del cuerpo se mueven hacia adentro y hacia afuera). Sin embargo, esto debe evitarse si se usa con cuidado y correctamente.

En casos extremos, dolor y ampollas son el resultado. Esto se puede prevenir revisando cuidadosamente la piel debajo de los electrodos durante el tratamiento. También se ha descrito hormigueo o pinchazos leves, pero estos suelen desaparecer por sí solos.

Inmediatamente después del tratamiento, las áreas de piel afectadas pueden enrojecerse y pueden aparecer pequeñas ampollas. En el peor de los casos, las áreas alteradas debajo de los electrodos pueden resultar dañadas por quemaduras. Es fundamental informar al terapeuta sobre esto para optimizar los próximos tratamientos y evitar mayores daños.