Mononucleosis infecciosa: tratamiento

¿Cómo se trata la fiebre glandular?

En la mayoría de los casos, los médicos tratan la fiebre glandular (mononucleosis infecciosa) que se acompaña de síntomas sólo contra los síntomas. Esto significa que en la mayoría de los casos la fiebre se reduce y el dolor se alivia con la medicación adecuada. Sólo en casos graves es necesario el uso de cortisona u otras medidas.

Un curso asintomático en niños, que a menudo ni siquiera se nota, no requiere tratamiento.

Actualmente no es posible una terapia contra el propio virus de Epstein-Barr (VEB), ni siquiera una cura completa (o una “limpieza” del virus como se busca en la medicina alternativa). Una de las razones es que el virus, que pertenece al grupo de los virus del herpes, sobrevive de forma silenciosa en las células del sistema inmunológico durante toda la vida y sólo se reactiva esporádicamente.

Tratamiento de los síntomas: ¿Cómo es la terapia?

En un curso sin complicaciones, el tratamiento sólo es útil para aliviar los síntomas. En particular, se baja la fiebre y se alivia el dolor.

Los médicos recomiendan observar los siguientes puntos en caso de infección por el virus de Epstein-Barr:

  • Tómatelo con calma y, sobre todo, evita esfuerzos físicos más intensos, no practiques ningún deporte.
  • Beba suficiente, especialmente si tiene fiebre.
  • Tome medicamentos para reducir la fiebre en consulta con su médico de cabecera si es necesario.
  • Evite el alcohol y los alimentos grasos para proteger el hígado, que ha sido atacado por la infección.
  • En consulta con su médico, ajuste los medicamentos que toma regularmente para proteger el hígado.

Dado que el cuerpo pierde más líquido durante la fiebre, es particularmente importante beber muchos líquidos. Muchos pacientes se sienten especialmente cansados ​​y apáticos. Lo mejor que puedes hacer aquí es simplemente descansar y tomártelo con calma.

Homeopatía para el alivio

Para aliviar los síntomas de la fiebre glandular de Pfeiffer, algunos recurren a preparados homeopáticos. Estos incluyen belladona, ferrum phosphoricum y aconitum para reducir la fiebre.

¿“Drenar” el virus con medicina alternativa?

La medicina alternativa está familiarizada con el concepto no sólo de combatir el virus, sino también de “expulsarlo”. Esto significa eliminarlo por completo del cuerpo. En este sentido, deberían ayudar diversos preparados homeopáticos y naturopáticos como, por ejemplo, “Lymphdiaral”, “Lymphomyosot”, “Thuja Injeel”, “Thuja Nestmann” o “Aurum Nestmann”, y también se pueden utilizar métodos naturopáticos como la biorresonancia.

Actualmente no es posible una “cura” del virus de Epstein-Barr, ya que el patógeno, que pertenece al grupo de los virus del herpes, sobrevive de por vida en las células del sistema inmunológico de forma silenciosa y oculta.

El concepto de homeopatía y su eficacia específica son controvertidos y no están claramente demostrados por estudios.

¿Qué remedios caseros pueden ayudar?

Los remedios caseros comunes que ayudan con la mononucleosis aguda también reducen la fiebre por un lado y alivian el dolor por el otro.

Además de descansar, beber mucho líquido y comer alimentos de fácil digestión, las compresas para terneras, por ejemplo, ayudan a reducir las fiebres muy altas. Además de los tés calmantes con manzanilla, por ejemplo, las compresas refrescantes ayudan con los ganglios linfáticos inflamados.

Los remedios caseros tienen sus límites. Si los síntomas persisten o empeoran, se debe consultar a un médico inmediatamente.

La terapia con antibióticos suele ser inútil.

Los antibióticos no son eficaces contra los virus. El uso descuidado y no selectivo de antibióticos no sólo provoca efectos secundarios frecuentes, como molestias digestivas, sino que también puede hacer que gérmenes potencialmente patógenos se vuelvan insensibles (resistentes) a ellos. La propagación de la resistencia a los antibióticos, como MRSA (Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (o multirresistente), es un problema creciente en la medicina.

Si son necesarios antibióticos, el médico evitará en la medida de lo posible sustancias activas del grupo de las aminopenicilinas (por ejemplo, amoxicilina o ampicilina). Estos suelen causar una erupción cutánea grave en casos de mononucleosis.

Si hay fiebre glandular y se planea una cirugía de amígdalas, es necesario posponer la cirugía porque los médicos evitan operar en una garganta inflamada.

Cortisona para la fiebre glandular complicada

En niños con inmunodeficiencia congénita es posible intentar un tratamiento con quimioterapia o anticuerpos artificiales.

Los antivirales como el aciclovir y otros no muestran suficiente efecto contra el EBV.

Tratamiento para la rotura del bazo

Una complicación particularmente temida de la fiebre glandular es la rotura del bazo. El bazo es un órgano muy perfundido, por lo que el evento pone en peligro la vida. Los individuos afectados requieren cirugía inmediata. Durante la cirugía, se extirpa el bazo.