Envenenamiento por mercurio: síntomas, terapia

Breve descripción

  • Síntomas: salivación, náuseas, vómitos, franja oscura en la línea de las encías, dificultad para concentrarse, alteraciones del sueño, estado de ánimo deprimido, temblores, alteraciones visuales y auditivas.
  • Causas: Inhalación de vapores tóxicos de mercurio, ingestión de mercurio a través de la piel y membranas mucosas, consumo de pescado contaminado con mercurio, ingestión accidental de mercurio líquido.
  • Tratamiento: evitación de la fuente del veneno, carbón activado, terapia de eliminación, terapia sintomática.
  • ¿Qué es el envenenamiento por mercurio? Intoxicación aguda o crónica con el metal pesado tóxico mercurio (Hg).
  • Diagnóstico: Síntomas típicos, detección de mercurio en sangre, orina y cabello.
  • Prevención: respetar las medidas de protección en el lugar de trabajo, sustituir los viejos termómetros de mercurio por dispositivos modernos; no dar empastes dentales de amalgama a niños, mujeres embarazadas y en período de lactancia, mujeres embarazadas: pescado únicamente de granjas controladas por alimentos

¿Cuáles son los síntomas del envenenamiento por mercurio?

Síntomas de intoxicación aguda por mercurio:

  • Membranas mucosas quemadas
  • Salivación
  • Náuseas
  • Vómitos
  • Calambres abdominales
  • Salida de orina baja

Síntomas de intoxicación crónica por mercurio:

  • Inflamación y ulceración de la mucosa oral.
  • Franja oscura en la línea de las encías.
  • Picor
  • Síntomas psicológicos: irritabilidad, cambios de humor, falta de concentración, trastornos del sueño, depresión, psicosis.
  • En caso de daño al sistema nervioso central: temblores, trastornos del habla, alteraciones visuales, trastornos auditivos.
  • La pérdida de peso
  • Daño renal: pequeña cantidad de orina o ya no hay producción de orina

¿De dónde viene el envenenamiento por mercurio?

El mercurio ingresa al cuerpo a través de varias vías:

Inhalación de vapores de mercurio (captación por inhalación).

El mercurio inhalado es el más peligroso. Entra al torrente sanguíneo a través de los pulmones y de allí al cerebro, donde causa graves daños secundarios.

Los empastes de amalgama no suponen ningún peligro para el propio usuario. Aunque tienen la mitad de mercurio y esto se puede detectar en el cuerpo de personas con empastes de amalgama, la cantidad que liberan los empastes es pequeña y se considera inofensiva.

También existe cierto peligro cuando se rompen los termómetros para la fiebre, especialmente para bebés y niños pequeños. Para los adultos, la cantidad de mercurio en un termómetro clínico es demasiado pequeña para causar problemas de salud.

El mercurio llega a los animales a través de aguas residuales industriales contaminadas. Los peces depredadores como el tiburón, el pez espada y el atún, así como los peces viejos, están especialmente contaminados. La intoxicación crónica por mercurio a través del consumo de pescado también se conoce como enfermedad de Minamata, llamada así por un envenenamiento masivo por mercurio en la ciudad japonesa de Minamata a mediados de la década de 1950.

Captación a través de la piel y mucosas (captación percutánea).

Ciertos ungüentos (p. ej., para blanquear la piel), gotas para los ojos o líquidos para lentes de contacto contienen pequeñas cantidades de mercurio.

Transferencia de madre a hijo (captación transplacentaria)

Mercurio es placentario. Esto significa que pasa de la madre al torrente sanguíneo del feto a través de la placenta. En los niños afectados, el desarrollo físico y mental suele verse afectado.

Tratamiento de la intoxicación aguda por mercurio.

El envenenamiento agudo, como el que ocurre después de la ingestión accidental de grandes cantidades de mercurio, requiere tratamiento inmediato. El objetivo aquí es eliminar el veneno del cuerpo lo más rápido posible para evitar daños consiguientes.

Terapia de excreción: Los principios activos ácido dimercaptopropanosulfónico (DMPS) y D-penicilamina ayudan a eliminar la toxina del cuerpo. Los médicos se refieren a estos agentes como antídotos. Se unen al mercurio y forman compuestos insolubles (quelatos) que el cuerpo no absorbe. En cambio, se excretan a través de los riñones.

Tratamiento de la intoxicación crónica por mercurio.

Terapia de excreción: El DMPS también se utiliza en intoxicaciones crónicas por mercurio para facilitar la eliminación de toxinas a través de los riñones.

Vitaminas: La vitamina B1 favorece la excreción de metales pesados.

Terapia sintomática: si se presentan otros síntomas, estos también se tratan. En el caso de una exposición crónica al mercurio, por ejemplo, a menudo se produce un intenso picor en la piel, que puede aliviarse con ungüentos adecuados.

  • Recoge los glóbulos de mercurio. Por ejemplo, utilice un trozo de cinta adhesiva o barra.
  • Coloca los glóbulos en un recipiente de vidrio hermético y llévalos al punto de recogida de residuos peligrosos. ¡No los deseche con la basura doméstica!
  • Evite aspirar las perlas con la aspiradora. Si esto es inevitable, lleve la bolsa de la aspiradora bien cerrada al punto de recogida de residuos peligrosos.
  • ¡Ventile bien la habitación!

El curso de la intoxicación por mercurio depende de cuánto y en qué forma el mercurio ingresa al cuerpo. Los médicos distinguen entre intoxicación aguda y crónica.

Curso de intoxicación aguda por mercurio.

Curso de intoxicación crónica por mercurio.

La intoxicación crónica por mercurio suele pasar desapercibida durante algún tiempo. Dado que sólo pequeñas cantidades del veneno ingresan al cuerpo, los síntomas se desarrollan de manera insidiosa en unos pocos días o algunas semanas.

Pronóstico

El pronóstico de la intoxicación por mercurio depende de la cantidad de mercurio que se haya ingerido y de si ya se han producido daños en los órganos (hígado, riñones, sistema nervioso central).

En las intoxicaciones agudas reconocidas y tratadas a tiempo, el pronóstico es bueno. Después de una intoxicación crónica, el daño suele ser irreversible.

¿Qué es el envenenamiento por mercurio?

El envenenamiento por mercurio (mercurialismo, intoxicación por mercurio) es el término que los médicos utilizan para describir el envenenamiento agudo o crónico con el metal pesado mercurio (del latín: hidrargyrum, designación en la tabla periódica: Hg).

¿Qué es el mercurio?

A temperatura ambiente, comienza a evaporarse lentamente, formando vapores tóxicos que son inodoros y, por tanto, imperceptibles para los humanos. Los vapores también son más pesados ​​que el aire, por lo que caen al suelo, por lo que los bebés y los niños pequeños corren especial riesgo.

Mercurio se presenta en tres formas:

Sal de mercurio inorgánica: Presencia en cosmética (especialmente en ungüentos blanqueadores como los “ungüentos para pecas”).

Mercurio ligado orgánicamente: presencia en pescados contaminados con mercurio (pescados viejos, peces depredadores como tiburones, peces espada, atún), conservantes en gotas para los ojos y líquidos para lentes de contacto, vacunas, soluciones desensibilizantes.

¿Qué tan peligroso es el mercurio?

Los vapores de mercurio que se inhalan durante un largo período de tiempo son los más peligrosos. El mercurio ingresa al torrente sanguíneo a través de los pulmones y se acumula en los órganos internos y el cerebro. Esto provoca daños permanentes en los órganos que, en ocasiones, son mortales si no se tratan.

El mercurio líquido, por otro lado, es menos peligroso porque no es absorbido por el cuerpo sino que se excreta en las heces.

Examen y diagnóstico.

Para determinar cuánto mercurio hay en el cuerpo, el médico realiza las siguientes pruebas:

Análisis de sangre: el mercurio sólo se encuentra en la sangre durante poco tiempo, ya que se deposita rápidamente en órganos internos como el hígado o los riñones. Por lo tanto, un análisis de sangre sólo proporciona información sobre la exposición actual o reciente al mercurio.

Análisis del cabello: El mercurio orgánico (consumo de pescado contaminado con mercurio) se incorpora a la raíz del cabello y, por lo tanto, puede detectarse fácilmente mediante el análisis del cabello.

Si los valores medidos exceden el “valor HBM-II” definido por la Comisión de Biomonitoreo Humano, es posible que se produzca un deterioro de la salud y el paciente recibirá la terapia adecuada.

Prevención

Desde julio de 2018, la amalgama ya no podrá utilizarse en tratamientos odontológicos de dientes temporales, de niños menores de 15 años y de mujeres embarazadas y en período de lactancia. Además, se recomienda a las mujeres embarazadas que consuman pescado únicamente de fuentes controladas por las normas alimentarias.

En caso de contacto con mercurio en el lugar de trabajo, es importante seguir las medidas de protección dispuestas por el empleador.